El pasado sábado, una familia compuesta por Ariel Arcenio, de 32 años; su pareja, Beatriz, de 29; y sus 2 hijos pequeños, Celeste, de 4 años, y su hermano, de 2 años, intentaban cruzar el río Paraná desde Misiones hacia Paraguay. Durante el transcurso, la canoa en la que viajaban se rompió, haciendo que se hundiera y provocando que todos cayeran al agua. La menor no logró sobrevivir, mientras que su padre continúa desaparecido,
Beatriz solo logró sujetar a su hijo menor y nadar hacia la orilla, poniéndolo a salvo. Arcenio, en medio de la situación, quiso rescatar a su hija, pero ambos fueron llevados por la corriente. La madre alertó a las autoridades, lo que llevó a un operativo de búsqueda y rescate coordinado entre la Policía de Misiones y la Prefectura Naval Argentina (PNA).
Tras horas de búsqueda, el cuerpo sin vida de Celeste fue encontrado el domingo pasadas las 15.30, cerca del lugar donde se hundió la canoa. El cuerpo de la pequeña fue trasladado al hospital local, donde se confirmó la causa de muerte por asfixia por sumersión. Las autoridades siguen con la búsqueda de Arcenio, con la esperanza de encontrarlo con vida o, al menos, recuperar su cuerpo. La Prefectura pidió colaboración a los vecinos de la zona por cualquier dato que pueda ayudar en la búsqueda.
Durante la investigación, se descubrió que Arcenio tenía una orden de detención vigente por un delito contra la integridad sexual, dictado por el Juzgado de Instrucción N°2 de Jardín América. Se cree que ese fue el motivo por el cual la familia habría querido cruzar ilegalmente la frontera.
El Ministerio Público Fiscal de Misiones está investigando las circunstancias del accidente, así como también los antecedentes de Arcenio y su posible intención de fugarse del país por sus delitos. Beatriz y su hijo están en buen estado de salud y están siendo atendidos por médicos.
Mucha gente utiliza este tipo de embarcaciones para evitar los controles de fronteras. Además de ser peligrosas por lo endebles, aún más riesgos hay si no se utilizan los equipos de seguridad correspondientes: la familia no llevaba chalecos salvavidas. La profundidad del río en esa zona puede superar los 20 metros y la corriente es fuerte, lo que hace que circular por allí resulte peligroso.
Vecinos de General Urquiza dijeron que la falta de controles convierte estos pasos en riesgos constantes. También comentaron que la zona de Puerto Lapacho es utilizada muchas veces para el tráfico ilegal de personas y mercaderías. Prefectura Naval informó que no tenían reportes de esta familia ni de ninguna embarcación saliendo de ese punto el día del incidente.
La PNA y la Policía de Misiones extendieron recursos adicionales por la zona, con personal especializado en rescates acuáticos y embarcaciones.
Las autoridades reiteraron la importancia de utilizar los pasos fronterizos habilitados y de cumplir con la normativa para garantizar la seguridad de todos. Pidió a la gente evitar el uso de embarcaciones no autorizadas y respetar las indicaciones.
La búsqueda del cuerpo del hombre desaparecido continuará este lunes con un operativo por tierra y agua. Aunque las autoridades creen que murió ahogado, no descartan que haya logrado salir del río.
Axel Baglioni – 2°B Turno Mañana