El pasado miércoles, un niño de 12 años mató a su padrastro a puñaladas para defender a su madre, que estaba siendo atacada a golpes por su pareja.
El hecho ocurrió en San Francisco Solano, partido de Quilmes, en horas de la mañana, cuando el chico tomó un cuchillo de la cocina y lo clavó en la espalda de Rubén Cardozo, de 37 años.
Las investigaciones de la Fiscalía N°1 de Menores del Departamento Judicial de Quilmes arrojan que el hombre arribó al domicilio ebrio mientras María del Pino estaba en su dormitorio. Cardozo comenzó a atacar a quien era su pareja y, ante los gritos de auxilio, el menor acudió en ayuda de su madre, asestándole al agresor al menos 4 puñaladas.
Cardozo caminó hasta la puerta, se desplomó y murió desangrado. En la vivienda se encontraban los dos hijos que compartían y otros tres menores, entre ellos el protagonista.
La causa, llevada a cabo por María Julia Bottaso, es investigada como homicidio en defensa propia y de terceros. Más allá de eso, el niño es inimputable. Durante la pesquisa, se secuestró el arma, todavía con las manchas de sangre, mientras que la fiscal ordenó que se les tome declaraciones a todos los presentes en el hogar. Al ser menores, se realizará en Cámara Gesell.
Candela, hermana del joven, declaró en Radio Mitre: «Se ve que llegó alcoholizado a mi casa, mi mamá se levantó y le encajó una piña de una. Tiene un chichón en la frente».
«La golpeó sin parar y ahí se levanta mi hermano. De la desesperación, intentó separar, pero la estaba ahorcando y se estaba muriendo mi mamá, entonces agarró un cuchillo y, como estaba de espaldas, se lo clavó 3 o 4 veces, no sé», continuó la joven.
Además, opinó que su hermano «hizo lo que tenía que hacer» y que «obviamente haría lo mismo». Si bien aclaró que «era la primera vez que pasaba a un nivel así de violencia», su madre «ya había hecho la denuncia dos veces, pero no hicieron nada».
Finalmente, fue consultada sobre cómo se encontraban María y su hermano: «Mi mamá está destrozada, obvio, casi se muere. Mi hermano también, se siente culpable, a pesar de haber defendido a su madre. Se durmió llorando».
Dante Di Rocco – 2°B Turno Mañana