Jack Draper obtuvo la gloria en el ATP 500 de Viena

El británico consiguió la victoria contra Karen Khachanov en la gran final.

Jack Draper y su segundo titulo en su carrera
Jack Draper y su segundo titulo en su carrera

Jack Draper se proclamó campeón del ATP 500 de Viena tras vencer a Karen Khachanov por 6-4 y 7-5 el último domingo en el Erste Bank Open. Fue el primer título de esa envergadura para el británico, y el segundo en su corta carrera. El anterior lo obtuvo este mismo año en Stuttgart.

Para llegar a la tan ansiada final, ambos tenistas tuvieron que derrotar y dejar atrás a importantes rivales. Draper derrotó en fila a Kei Nishikori, Luciano Darderi, Tomas Machac y Lorenzo Musetti. Por su lado, el ruso tuvo que vencer a Thiago Seyboth Wild, Brandon Nakashima, Matteo Berrettini y Alex de Miñaur.

En un gran partido, en la que se enfrentaban la juventud contra la experiencia, Draper no se dejó intimidar ante su oponente y desde el primer set demostró tener mucha confianza y tuvo el control del juego.

En el segundo parcial, cuando el encuentro iba 4-0 a favor del británico, Khachanov pudo reaccionar un poco y recuperar dos breaks en contra. A pesar de esto, y gracias a la gran superioridad que tenía Draper en el partido, en el onceavo game le volvió a romper el servicio y al final lo remató con su saque.

Luego de un encuentro con mucha estrategia y táctica, demostrando el talento que tienen ambos jugadores, el británico sacó un poco de ventaja con su potente saque y acertó golpes precisos para superar al ruso. Gracias a su gran determinación y concentración, pudo sacar el partido adelante y ganó la final, para así obtener su primer trofeo de un torneo de ATP 500.

Al finalizar el partido, Draper expresó sus sensaciones: «Estaba jugando realmente bien y, de repente, la inercia cambió. Sinceramente, no me he sentido nervioso. He fallado algunas pelotas y tomado decisiones incorrectas. Además, Karen ha elevado su nivel. Es una demostración de lo buen jugador que es, un luchador que está en plena forma».

«Aunque todo se haya apretado, me he mantenido sólido y con una buena actitud mental. Por suerte, he logrado salir de ello. Ha sido un alivio. Es mi primer ATP 500 y la sensación es increíble. Estoy inmensamente feliz, orgulloso de mí mismo y de mi equipo. Vivimos para momentos así, vamos a intentar disfrutarlo», concluyó con el trofeo en sus manos.

Después de completar una semana de ensueño, logrando el título y acumulando un balance de 37-21 en la temporada y un 2-2 en finales, Draper lo va a finalizar con el broche de oro: va a escalar hasta la posición número 15 del mundo, su mejor clasificación en el ranking ATP.

Además de esto, el británico se convirtió en el segundo jugador en coronarse como campeón del ATP 500 de Viena en su primera participación. El anterior: su compatriota y ex número 1 del ranking ATP Andy Murray, cuando logró el título en el año 2014.

Por su lado, Khachanov felicitó al británico por el título: «Deseo felicitar a Jack y a su equipo por esta merecida victoria. Has sido valiente toda la semana. Estás subiendo esta temporada y te deseo muchos éxitos en el futuro. Espero que volvamos a compartir la pista y tomarme una revancha por esta derrota».

«Cuando alcanzas la final, piensas en ganarla. No puedo quejarme, las últimas dos semanas han sido fantásticas. Tras ganar la pasada semana y llegar por primera vez a la final de Viena, debo darle las gracias a mi equipo. He estado cerca de remontar, eso muestra que necesitas seguir firme, ser positivo y luchar”, manifestó el ruso.

Tras esta derrota, Khachanov no pudo conseguir su segundo título consecutivo después de ganar el ATP 250 de Almaty y se le cortó una racha de varios triunfos consecutivos en el circuito.

El próximo desafío para ambos será el Masters 1000 de París, donde el ruso obtuvo el mayor trofeo de su carrera en el año 2018. Los dos tenistas debutarán mañana en el Accor Arena: Khachanov deberá enfrentar al español Pablo Carreño Busta, mientras que Draper lo hará ante el checo Jiri Lehecka.

 

Matías Asplanatti – 2ºA Turno Mañana