Quimsa logró una nueva victoria en una Bombonerita colmada al vencer a Boca por 78-73 y se acomoda en los playoffs de la máxima categoría de la Liga Nacional de Básquetbol. Con la ilusión de lograr la clasificación definitiva a la final y coronar una temporada soñada, los santiagueños se recuperaron del tropezón del segundo juego, quebraron la paridad y se adueñaron del partido.
Hubo varios destacados en un encuentro con un resultado ajustado en el marcador, pero abultado en el nivel de juego. Por el lado de la visita, Juan Brussino cumplió su labor en la conducción y anotó 13 puntos y 2 asistencias, mientras que el capitán -Fabián Ramírez Barrios-, deslumbró con 13 tantos y misma cantidad de rebotes. Con tan solo una unidad menos (12), aportaron lo suyo Emiliano Basabe, Tayavek Gallizzi, y el estadounidense Brandon Robinson.
Por su parte, en el conjunto de la Ribera las luces fueron acaparadas nuevamente por el base -José Vildoza-, quien se hizo de 19 tantos para completar sus registros con seis rebotes y cuatro asistencias. Sebastián Vega y Wayne Langstone se subieron al podio al sumar 16 puntos y 10 rebotes y 14 unidades y 4 tableros respectivamente.
El duelo no dio respiro, alternaron protagonismo en cada cuarto y batallaron hasta el último minuto. Los santiagueños fueron de menor a mayor, imprecisos en el aspecto defensivo, fallando en los libres y en la salida rápida. Robinson -acostumbrado a adueñarse de la red- no logró su mejor versión producto de un rival que supo incomodarlo de principio a fin y que fue letal en ofensiva con un Langstone iluminado para sellar el marcador en 20-17.
En el segundo cuarto, la Fusión se despabiló, recuperó la memoria y con un goleo repartido entre Basabe -de actuación notable en ataque- y la jerarquía de Ramírez Barrios golpeó al anfitrión imponiéndose por 27-16. El tercer capítulo fue una réplica, la visita no bajó la marcha, redobló la apuesta y volvió a sacar 11 puntos de diferencia ante un rival que no logró hacer pie ni aprovechar la localía para imponer su juego.
Otra gran participación del siempre tenaz Juani Vildoza, no alcanzó para arrebatarle la fiesta a su contrincante tras la remontada por 20-12 en el último cuarto. A poco del cierre del partido, la tensión se hizo presente y se reflejó en múltiples pelotas perdidas y faltas reiteradas por llegadas a destiempo. Si bien el Xeneize repuntó y acomodó sus filas, la ventaja final de 5 puntos fue suficiente para que el último campeón plante la bandera del 2-1 parcial. El próximo encuentro, que repite escenario en el “Luis Conde”, puede ser decisivo ya que, si Quimsa festeja por segunda vez consecutiva, sellaría el pasaje a la gran final. Por el contrario, si el conjunto azul y oro resulta victorioso, estiraría la serie a un quinto partido, a disputarse en tierras santiagueñas.
Hasta el momento se cruzaron en 49 oportunidades, con 32 triunfos a favor de la Fusión y 17 para los de la Ribera. En los últimos dos encuentros por la temporada 2023-2024, los dirigidos por Leandro Ramella ratificaron su ventaja tras imponerse por 72-67 y 71-53, ambos de visitante. Con el guiño de un historial positivo, los de Santiago enfrentarán el próximo choque con la confianza y motivación necesaria para cumplir el objetivo mayor: volver a coronarse y dejar atrás las frustraciones de las finales perdidas en 2020-2021 (ante San Lorenzo por 3-2) y en la 2021-2022 (frente a Instituto de Córdoba, por el mismo resultado).
Su capitán Ramírez Barrios declaró al final del encuentro: “Estoy muy contento por el trabajo que hizo el equipo. Volvimos a las fuentes, volvimos a ser Quimsa, siendo intensos en defensa, tratando de cerrarles los caminos a Boca. Después, en ataque, nos pasamos muy bien la pelota, siempre buscando el mejor tiro”.
Con los pies en la tierra y palpitando el próximo cruce, reconoció: “Nos tenemos que acostumbrar a jugar con un goleo bajo, ellos defienden muy bien por eso tuvimos que igualar la energía, pero creo que lo hicimos muy bien”.
Milagros Barros Vázquez – 2ºTN