Una violenta escena fuera de contexto aconteció el pasado martes en el Hospital Doctor Eduardo Oller, ubicado en la localidad bonaerense de San Francisco Solano. Un hombre sufrió un ataque desmedido de furia tras acusar al centro médico por demoras en la atención y padecer un colapso sanitario luego que no atendieran a su esposa. Al punto que desató un caos dentro de la guardia cuando comenzó a agredir al personal de salud y policías de seguridad presentes, mientras también rompía objetos. Debió ser detenido y su inesperada actuación fue filmada por uno de los camilleros de la guardia.
El hecho transcurrió durante la noche del 31 de octubre cuando el agresor arribó a la clínica para que su pareja sea atendida por un malestar estomacal que padecía. Sin embargo, con el transcurso de los minutos, la mujer se descompensó y el hombre entró en desesperación ante la falta de respuesta médica.
En consecuencia, el agresor se dirigió directo a la recepción, pero no para solicitar ayuda de emergencia, sino que directamente decidió trepar la puerta enrejada que diferenciaba la sala de espera de la admisión de los pacientes y comenzó a amenazar a una de las médicas.
Un hombre descontrolado ingresó a la Guardia del Hospital Oller de Solano, trepó la reja y golpeó a médico para que atiendan a su esposa. El médico intentó explicarle que había otras personas antes. pic.twitter.com/QtZjcSEpgw
— Agencia El Vigía 🇦🇷 (@AgenciaElVigia) October 31, 2023
«Es mi señora, ¿por qué no la atendés?», repetía el agresor mientras una guardia de seguridad intentaba contenerlo y alejarlo del lugar prohibido al que había ingresado. «Tranquilo, tranquilo», respondía una voz detrás de cámara en su intento de calmar las aguas. Sin embargo, el hombre comenzó a golpear los escritorios y derribar las computadoras junto a otros objetos que se encontraban sobre ellos.
«Es mi señora», repetía el individuo, quien tras invadir la secretaría decidió abrir la puerta para darle paso directo a su esposa, que ingresó a un consultorio siendo arrastrada por el piso con la ayuda de varias personas presentes en la guardia debido a que su descompensación previa no le permitía mantenerse de pie.
«Pedía a gritos que la atiendan porque se sentía mal, pero luego empezó a insultar y se puso muy violento«, confesó uno de los testigos de la situación al medio Voces de Quilmes. Finalmente, la mujer pudo ser atendida pero su esposo fue detenido por los incidentes causados.
A raíz de la agresión, el personal médico de la clínica denunció el colapso que sufren diariamente ante los pocos trabajadores con los que cuentan y por la falta de insumos básicos. No obstante, al no tener respuesta alguna ante sus reclamos, los vecinos de Solano se encuentran desde hace algunos meses vendiendo rifas o realizando colectas que permitan ayudar al hospital: gazas, algodón y artículos de limpieza suelen ser los objetos que más reciben.
Por su parte, la Secretaría de Salud de Quilmes emitió un comunicado al respecto de la agresión. «El Hospital de Solano Dr. Eduardo Oller repudia los hechos violentos de público conocimiento y llama a la reflexión a la comunidad con respecto al trabajo que con mucha dedicación realizan los y las trabajadoras de la Salud», expuso.
También desmintió que la paciente debió aguardar mucho tiempo, al manifestar que «no es cierto que haya tenido que esperar para recibir atención medica. Se encontraba con parámetros clínicos normales».
Y con respecto a las denuncias por falta de personal, negó: «En los últimos 4 años el Hospital de Solano ha experimentado un fuerte crecimiento, duplicando la cantidad de camas pasando de 64 a 122, creando por primera vez en su historia una sala de internación de pacientes adultos y la Unidad de Cuidados Intensivos».
La guardia, recordando antecedentes similares
A pesar que no resulta común encontrar situaciones en la que los pacientes decidan agredir al personal médico del Hospital, en el caso de la clínica perteneciente al partido de Quilmes no es la primera vez que padece un hecho de características semejantes. Es que hace tan solo un año atrás, en junio de 2022, se registró un incidente similar.
Ocurrió cuando un adolescente llegó de urgencia tras recibir un disparo en la cabeza, del cual no pudo ser salvado a tiempo. En consecuencia, los familiares del fallecido comenzaron a agredir al personal médico que lo atendió, causando también destrozos y debiendo intervenir la policía para que la situación no pase a mayores.
Bruno Carbajo – 2°A TT