En el suroeste de Asia se desató una serie de ataques entre Israel y el grupo político militar palestino conocido como Hamás. El sábado 7 de octubre se registró sorpresivamente el primer ataque de Hamás desde la Franja de Gaza hacia el sur de Israel. Frente a esto, desde el gobierno israelí declararon formalmente un inicio de guerra autorizando acciones militares significativas contra dicho grupo.
El ataque por parte de Palestina no fue realizado de manera aislada ni al azar, dado que el conflicto que existe entre ambas partes tiene una larga historia. El Hamás, formado en 1987, tiene el objetivo de liberar a Palestina de los israelíes para lograr crear un estado islámico independiente.
La frontera entre ambos grupos se encontraba altamente reforzada, dado que Israel buscaba evitar a toda costa el ingreso de terroristas palestinos a sus tierras. Sin embargo, los combatientes del Hamás lograron ingresar, utilizando excavadoras para cortar aberturas en los alambres e ingresar a las tierras vecinas, haciéndolo también a través del cielo y mar. Con su ingreso lograron infligir bajas y tomar una gran cantidad de rehenes.
Dicho ataque coincidió con la celebración de la festividad de Sucot. A raíz de esto murieron miles de personas y fueron capturadas más de 200 individuos, incluyendo niños, mujeres y ancianos.
Por su parte, Israel declaró la guerra y respondió con una operación militar llamada “Operación Espada de Hierro”, realizando fuertes bombardeos e incursiones militares en Gaza.
A su favor, las fuerzas israelíes tienen un potente sistema de defensa, conocido como Domo de Hierro, que tiene la finalidad de interceptar los cohetes que puedan lanzar desde Gaza, evitando la mayor cantidad de pérdidas posibles. En cambio, Palestina, al ser un territorio mucho más precario, no cuenta con algún sistema de defensa similar. Es por esto que, bajo los feroces ataques israelíes, han muerto más de 8.000 personas, muchos de ellos civiles. Incluye más de 3.000 niños, 2.000 ancianos y casi 500 ancianos.
Lo cierto es que Israel, al realizar sus ataques, carece de ciertos “códigos de guerra”. Esto se ve demostrado con sus potentes bombardeos tanto a escuelas, hospitales y zonas de mayor concurrencia civil, que podrían ser considerados como crímenes de guerra.
Al realizar un castigo colectivo a la comunidad palestina, Israel está violando derechos humanos, ya que ni siquiera da un previo aviso de ataque, permitiendo así que los civiles de la zona puedan evacuar.
El conflicto entre ambos territorios, Palestina e Israel, existe hace miles de años, y está anclado a varios factores, como política internacional y una lucha constante por el terreno. A su vez, hay un fuerte choque de costumbres y religión que, en lugar de coexistir y buscar la supervivencia de ambos pueblos en paz ,buscan imponerse sobre el otro con superioridad y no respetan las diferencias culturales ajenas.