Es una realidad que la fama es un mundo muy complicado y desgastante, en dónde la presión juega un papel importante. No todos pueden sobrellevar lo que implica ser reconocido en gran parte del mundo, ni siquiera Martina Stoessel, que desde pequeña debe lidiar con ello por su papel protagónico en «Violetta». Por eso, resulta de gran importancia el acompañamiento terapéutico en los artistas, como resaltó la cantante: «Hace dos meses que estoy haciendo terapia todos los días. Mi vida está buena de a ratos, como la de todo el mundo».
En su último show, en Barcelona, se la pudo ver con lágrimas en los ojos. En el escenario, frente a miles de personas, confesó: «Hace tres semanas estuve en un proceso de tocar fondo. No me podía levantar de la cama, tenía ataques de pánico por problemas personales. Fue pensar en España y saqué fuerza para volver a un escenario».
La otra artista argentina que habló sobre el tema y debió alejarse de los shows por tiempo indefinido fue «La Joaqui», por sufrir estrés traumático. En una historia publicada en su Instagram les dejó un sentido mensaje a todos sus seguidores. Si bien hace algunos días reapareció en sus redes publicando tres fotos de ella y algunas historias, fue sólo para llevar tranquilidad a la gente que la sigue. La madre de Shaina (su hija) dejó en claro que retomará sus actividades de a poco, cuando ella se sienta segura.
La última de la lista fue Karina «La Princesita», aunque ella fue la primera en hablar sobre el tema. El pasado 11 de mayo, publicó un tweet en la red social del pajarito azul con un emotivo mensaje hablando de «un proceso». Con el tiempo se la vio mucho mejor, ya que estas semanas estuvo cantando en algunas provincias de Argentina tales como Tucumán, Entre Ríos y Chaco. Además, hace no mucho participó en el cover de «Frágil» versión cumbia junto a NestorEnBloque.
Ojalá, Karina, siga por este camino porque se la ve feliz y que «La Joaqui» y «Tini» puedan recuperar esa motivación y superar aquello que no les permite avanzar para que puedan volver al escenario lo antes posible.
Joaquín Bahamonde 2°A