Es difícil en los deportes individuales sobresalir y, sobre todo, el sacrificio que demanda un deporte, los no que un deportista debe aprender a decir, y los sí que tiene que afirmar para construir un futuro de disciplina y hambre de gloria. Este es el caso de Julia Christen que obtuvo logros de manera precoz, ya que hoy solo tiene 17 años, pero con un recorrido y trayectoria que es de una persona de mucha más edad. Pudo vivir momentos únicos que le otorgó el deporte de maneras impensadas para ella. Lo que comenzó siendo un hobby y un deporte para ver que ocurría en su vida, terminó siendo un estilo de vida.
La nadadora del Lawn Tennis Club Esperancino, de Santa Fe, empezó a nadar en 2018 a modo de pasatiempo, en el cual ella recuerda a fuego ese día. “Me acuerdo que el primer día voy y mi profesor Oscar Colombo (actual entrenador), se tiró al agua con nosotros y nos explicó. La verdad que una clase muy buena. Y yo de ahí me enamoré del deporte y ahí, literalmente, no paré más”, expresó en una entrevista que brindó para Pirámide Invertida.
Lo sorprendente es que sus virtudes la llevaron rápidamente a competir. “Ese primer año ya había clasificado al Regional, al Provincial y al Nacional de los Juegos Evita en Mar del Plata. Y yo ni sabía nadar (risas) nadaba por inercia, porque tenía fuerzas”. La naturalidad con la que fue escalando peldaño tras peldaño Christen asombra, es de esos casos que las palabras y las explicaciones sobran y no define, ni encasilla las acciones que realiza.
En su primer Nacional, en 2019, conquistó la medalla de bronce en los 50 metros pecho. Punto aparte, previo a conseguir más logros, ocurrió un hecho inesperado para ella, y para el mundo del deporte. La pandemia. La santafecina no vivió buenos momentos durante el confinamiento. “La pasé mal. Yo tenía muchas capacidades, y que la pandemia me las haya sacado fue como un problema. Al punto de recurrir a psicólogos”, reconoce. Durante este tiempo la nadadora contó que trabajó incansablemente la parte mental para no derrumbarse ante el panorama.
Una noticia muy importante para la esperancina y para los argentinos, es que ya se clasificó para el Mundial de natación Fukoka 2023, de Japón, ya que tiene la marca B de los 50m pecho, pero… se decidió por otro compromiso.
“Este año está el mundial de mayores (Fukoka), y yo estoy en mi último año de juveniles. Entonces yo estoy tratando, por más que ya tenga las marcas, de que me llamen para el Mundial de Israel. Lo hago para poder disfrutar mi último año de juveniles. Y poder quedar entre las diez mejores, como quedé en el último Mundial. Porque si yo voy ahora al campeonato de mayores voy a quedar treinta y pico, porque me sacan diez años las nadadoras. Porque si voy al de Japón no voy a poder ir al de Israel”, explica.
Extensa vida deportiva le resta a Julia Christen y mientras esto ocurre, sigue deleitando a los fanáticos del mundo de la natación.
Mauricio Ayala, 2° A, turno tarde