El ciclismo urbano suele ser una de las actividades que muchos ciudadanos eligen como hobby a la hora de realizar actividad física. No solo por los beneficios que le brinda al cuerpo es que puede resultar atractiva, sino que pasear por la ciudad y recorrer varios kilómetros son los planes que puede involucrar su desarrollo. Sin embargo, a veces es necesario estar acompañado para que sea una actividad fructífera. En otras ocasiones puede resultar difícil hallar el camino indicado por el que transitar, al igual que enterarse de carreras amateurs que se organicen. Para eso, Rodrigo Pol, un fanático de las bicis, decidió dar una mano para todos los principiantes a través de un perfil de Instagram: Bicipiantes. Pero sin saberlo, a la vez creó una comunidad fanática por el vehículo de las dos ruedas, qe ahora busca llevar sus valores y su amistad por todo el país.
En los meses previos a la pandemia, Pol tomó la decisión de crearse un perfil dentro de las redes sociales para mostrar un lado diferente del ciclismo, aquel que mueve a miles ya sea solamente para ir y volver del trabajo como a quienes lo consideran como un estilo de vida. Su experiencia de años montado en una bicicleta le era suficiente como para brindar un asesoramiento mediante tips acerca de la vestimenta de un ciclista o enseñar cuáles eran los mejores recorridos por la Ciudad de Buenos Aires, como también para ofrecer talleres de reparación.
«Seguía a varios corredores y grupos, pero todos mostraban la foto perfecta llegando a destino, yo quería mostrar la cara que tenemos a las 5 de la mañana o después de tanto pedalear, o cuando pinchamos y terminamos engrasados», comentó Rodrigo Pol en diálogo con TN acerca de aquel material digital que buscó mostrar desde su celular. De forma casera, simplemente con la intención de mostrar un lado diferente del ciclismo como de cooperar a su propagación, fue la forma en que comenzó un largo camino para Bicipiantes.
Sin embargo, el aislamiento producto del COVID-19 terminó modificando el rumbo de su página. Los meses encerrado en su casa le valieron a Rodrigo para comenzar a aumentar el número de seguidores de su perfil y también para mantener un vínculo con varios ciclistas que extrañaban poder realizar su deporte favorito con frecuencia. «Empecé solo generando en las redes contenido muy casero. Cuando la pandemia permitió volver a salir, como interactuaba con mucha gente de manera virtual, se me ocurrió hacer una salida para conocernos. Nunca pensé que sería la locura que es hoy», agregó el fundador de Bicipiantes, quien en su primer encuentro logró reunir a más de 80 ciclistas.
Con tres años a cargo de la dirección de su usuario y once mil seguidores en su haber, la historia de Pol y su emprendimiento cambió por completo. Lo que simplemente iba a mantenerse como una ayuda virtual que oriente a ciclistas principiantes, terminó transformándose en un movimiento grupal de los más destacados dentro del mundo de las bicicletas. Incluso las juntadas quedaron programadas semanalmente, con un recorrido nuevo en cada uno de ellas. Como consecuencia, esto provocó el surgimiento de un grupo enorme de amigos que desean reencontrarse semana tras semana y entre todos ayudar a la fomentación del uso de bicicletas.
Los paseos por la ciudad -a una velocidad que varía de los 15 a 25 km/h de una extensa duración- le quedaron chico a Pol, quien notó esto, no se guardó en el molde y apuntó a la realización de travesías nacionales. Durante el 2022, destinos como San Pedro, Salta y Chascomús fueron algunos de los que los Bicipiantes visitaron. Y ahora apuntan a Mendoza y Sierra de la Ventana como próximos objetivos.
Además, la agrupación ya comenzó a forjar su identidad dentro del círculo de las bicicletas. «Por suerte, ya tenemos un nombre dentro de la comunidad ciclista y nos contactan mucho para que nos sumemos«, destacó Pol. Es que a pesar de tomarlo como una actividad recreativa, varias fueron las salidas que realizaron con otros grupos en forma de concientización, siendo la última el 2 de abril, cuando se conmemora el día Mundial del Autismo.
Aunque también saben cuándo encontrar los espacios dedicados al humor y la diversión. Obviamente, con la bicicleta acompañando a todos lados. Entre todos los encuentros, existe uno en particular que es el favorito de Rodrigo, sobre el cual le explicó a TN: «Otra gran salida que hacemos es el Ride de Hallowen que si bien no es de concientización, es un evento que nuestros seguidores esperan con ansiedad ya que salimos a pedalear disfrazados por la ciudad, con música en las bicis, también hacemos sorteos, es muy divertido, una fiesta. En el último, éramos más de doscientos cincuenta».
Igualmente, todo no se basa en simplemente andar en bicicleta. Tras tres años de experiencias, reconocimientos y aventuras, Bicipiantes pudo convertirse en algo más cercano a la amistad y diversión que a una simple comunidad que cumple con sus obligaciones semanalmente. El sentido de identidad y pertenencia es aquello que conquistó a cada uno de sus miembros. Hacer actividad física mientras se recorren lugares nuevos con amigos es una propuesta difícil de encontrar muchas veces. Y Rodrigo Pol triunfó uniendo dichos factores.
¿Cómo inscribirse en Bicipiantes?
Lo necesario para transformarse en un nuevo miembro de la comunidad resulta ser más cómodo de lo imaginado. Ningún requisito es necesario ya que el foco al que apunta el grupo inicia desde la calidad de principiante. «Subimos todo el material a nuestra cuenta de Instagram: @bicipiantes, allí pueden ver las salidas que hacemos. También contamos con un grupo de WhatsApp por el que nos mantenemos en contacto. Las salidas son gratuitas y no hace falta inscribirse previamente. Solo van al punto de encuentro a la hora indicada y listo», aclaró Pol para todo aquel que se encuentre interesado en sumarse. Además, vale agregar que cada uno de los recorridos realizados son con la ayuda de cinco guías que se intercomunican entre sí durante todo el viaje a través de una radio portátil.
Bruno Carbajo, 2° A, turno tarde