Como sucede cada 4 años, desde 1930 (excepto la época de las guerras) se juega el Mundial de Fútbol, este año es en Qatar y con ello también aparecen el álbum y los cromos de las mismas, con los países participantes, los jugadores y sus escudos.
Desde 1961 que la empresa, que se encarga de confeccionar y armar todo, es PANINI, que arrancó con la temporada 1961 del Calcio italiano y para 1970 realizó el primer álbum con el Mundial de México.
Desde allí continuó con los demás torneos hasta el actual realizando la misma temática, en la cual los kioscos vendían las figuritas en conjunto con el álbum y éstos explotaban de gente para poder conseguir las mismas.
Pero éste año algo cambió, algo se quebró y es que Panini decidió abrir el mercado y entregó sus productos a diferentes empresas tales como supermercados, estaciones de servicio, tarjetas de crédito y aplicaciones de delivery.
Esto produjo el estallido por parte de la Unión de Kiosqueros de la República Argentina (UKRA) que reclamó la exclusividad como fue en años anteriores, realizando reclamos tanto en las redes sociales, como en las vidrieras de sus negocios y llegando al punto de hacer un piquete en la puerta de la fábrica.