El gobierno ya envió al Congreso el proyecto que se empezará a debatirse la semana entrante, en el que pretende recaudar ingresos excepcionales, de las empresas que obtuvieron ganancias como consecuencia directa los precios internaciones a causa del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, además, sumando los efectos económicos causados por la pandemia Covid-19.
El oficialismo, que cuenta en la Cámara de Diputados con 117 votos a favor de la iniciativa, podría incorporar los votos de los cuatros diputados del Frente de Izquierda y seis votos del interbloque de Provincias Unidas. Pese a la expectativa que esa medida genera en el sector del oficialismo, la iniciativa encontrará en la Cámara de Diputados un terreno seco para avanzar.
En la presentación del proyecto, Alberto Fernández afirmó que: “cuando algunos ganan muchos y millones se empobrecen, eso no es una sociedad, se parece más a una estafa”. Y continuó con su análisis: “El mundo está viviendo una guerra singular, que se globaliza donde solo hay un teatro de operaciones sino una guerra de carácter económico que trasciende las fronteras de los países en conflicto”.
“Millones de seres humanos entran en riesgo y que muy poquitos ganen muchísimo con los efectos de esta guerra, y esa es una inmoralidad que nos puede permitir”, agregó el presidente.
La ley renta inesperada ya empezó a recibir críticas, una de ellas fue la Asociación Empresaria Argentina (AEA). “La Argentina debe volver a retomar la senda del desarrollo económico y social sostenible. Para ello resulta esencial generar las condiciones para que las pequeñas, medianas y grandes empresas puedan concretar inversiones que generen empleo y hagan crecer la producción y las exportaciones. La creación de nuevos impuestos, va en la dirección opuesta a lo señalado. En la Argentina ya están en vigencia 165 impuestos y la carga tributaria sobre el sector formal de la economía es muy elevada y ha crecido fuertemente en los últimos 20 años”, comento la AEA.
El primer ministro de Inglaterra, Boris Johnson anunció que buscará gravar la renta inesperada con una tasa del 25% a empresas de gas y petróleo. La iniciativa de esta renta se centralizará solo en empresas y alcanzaría al 1% de las compañías que operan en el país. Según lo que evalúa el gobierno pagarían alrededor de 350 empresas.
Esta determinación deberán pagarlo empresas con Ganancia Neta Imponible o Ganancia Contable superior a $1.000 millones y cuya Ganancia Neta haya crecido en términos reales y que cumplan con una serie de condiciones: margen de ganancia (Ganancia Contable) en 2022 superior al 10% y aumento del margen de ganancia en 2022 a diferencia al 2021 de al menos un 20%.
“La forma de pagarlo será con el impuesto a las Ganancias y el destino será un fondo de rentabilidad para que la Nación y las provincias puedan contar con esos recursos”, continuó el ministro de Economía, Martín Guzmán. “Todo el mundo hoy está lidiando con un problema de inflación, de distribución de los ingresos y con la necesidad de acciones por parte de los estados para evitar un mundo donde haya mayor pobreza y mayor desigualdad”, prosiguió el economista. “Hay sectores que se han beneficiado de la situación de la guerra porque hay precios de commodities que han experimentado aumentos muy grandes, y lo mismo ha ocurrido con la energía”, concluyó Guzmán.
La alícuota será del 15% y se va atribuir a la renta inesperada (Ganancia Neta). Se aplicará el ejercicio fiscal 2022 y se pagará en el 2023. Por este nuevo impuesto serán afectadas aquellas empresas que cumplan las condiciones definidas según balances finalizados tras la sanción de ley y durante un año.
Agustín Cora – 2ºB turno tarde