Es una realidad: cada vez más ex jugadores, del deporte que sea, aparecen en distintos programas y transmisiones deportivas como comentaristas y analistas del juego. En Estados Unidos, país rey en cuanto al entretenimiento, esta tendencia se ve potenciada con la National Football League (NFL), la liga más popular y poderosa de aquella nación.
Hace días, la noticia de que Tom Brady, el mejor QB de la historia y el más ganador de la liga (aún en actividad) firmó un contrato de una década y 375 millones con la cadena Fox Sports sacudió todo. El siete veces campeón del Super Bowl cobrará 37.5 millones por temporada durante 10 años, más que la gran mayoría de atletas en su deporte.
Una producción especial de: Fernando Senini, Marco Martínez, Lautaro Magliarella y Dante Gallastegui