Se confirma el avance opositor en la Argentina

La coalición Juntos por el Cambio resultó ganadora en las elecciones legislativas con una diferencia, a nivel nacional, de casi 10%. Las PASO de octubre […]

Lo que dejaron las últimas elecciones presidenciales de hace dos años. Foto: argentina.as.com

La coalición Juntos por el Cambio resultó ganadora en las elecciones legislativas con una diferencia, a nivel nacional, de casi 10%. Las PASO de octubre habían anticipado la derrota del oficialismo en todos los distritos y la carrera por recuperar terreno quedó trunca en la mayoría de las provincias.

Con este nuevo panorama el poder se abren varios interrogantes.

El Congreso que viene

El peronismo pierde el quorum propio del Senado desde el regreso de la democracia en 1983. Con 72 bancas disponibles, el oficialismo se queda con 35 a favor mientras que Juntos por el Cambio tendrá sus 31 senadores. Con este esquema de poder repartido el poder ejecutivo se verá obligado a negociar cada ley. Los primeros pilares serán el acuerdo con el FMI y el presupuesto 2022 respectivamente. En la cámara de diputados la situación es similar. Las dos coaliciones políticas reparten la mayoría de las bancas (257 en total): 118 para el Frente de Todos, 116 para Juntos. Aquí tal vez la única noticia positiva para el oficialismo dado que conserva la presidencia y la minoría de la cámara baja.

Carrera a la presidencia

Si bien es cierto que aún restan dos años de gobierno de Alberto Fernández, en estas elecciones se jugaba mucho de cara a las generales del 2023. En este punto quien más debe tener razones para festejar es Horacio Rodríguez Larreta. El actual jefe de gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires había puesto sobre la mesa sus dos candidatos para estas elecciones: Diego Santilli en provincia, María Eugenia Vidal en capital. El resultado lo eleva entre los presidenciables de la coalición: el “Colo” resultó ganador por un margen mucho menor que en las PASO, mientras que la ex gobernadora de la Provincia de Buenos Aires reafirmó que en la capital del país no hay fuerza que les haga mella.

La Libertad que avanza

El partido ideado por el verborrágico Javier Milei subió 3 puntos en comparación a las PASO y se consolida cómo la 3er fuerza en Capital y Provincia de Buenos Aires y desplaza al 4to lugar al Frente de Izquierda, aunque a nivel nacional aún conserva su posición en la terna. El discurso apolítico libertario caló hondo en Buenos Aires, sobre todo en el grupo etario entre 16 y 28 años mayormente varones. Lo llamativo fueron las victorias, no solo en las zonas más acaudaladas de la capital y gran buenos aires sino en los sectores más populares cómo en la zona Sur. La exitosa campaña fue ideada por el consultor Mario Russo (en esta nota detalla a la perfección la construcción de este fenómeno electoral) y terminó con un festejo inusual en el templo porteño de grandes gestas deportivas: El Luna Park.

Myriam al Congreso

El “hashtag” cobró fuerzas el sábado en Twitter (N de R: estuvo algunas horas como trending topic) y lograron un hito para la agrupación Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT) creada en 2011: por primera vez tendrán representación en la Ciudad de Buenos Aires. Si bien Bregman ya había ocupado un cargo de diputada, lo había hecho en representación de la Provincia de Buenos Aires. La fuerza de izquierda mantiene su tercer lugar a nivel nacional con el 6% de los votos (1,4 millones de sufragios)

La flamante diputada por la Capital Federal desde el búnker del FIT en el hotel Tribeca.
Es tiempo de consensos

El mensaje grabado desde Olivos de Alberto Fernández busca encontrar algo de paz de cara a sus próximos dos años que restan de su mandato. Tal vez, entre líneas, le haya contestado a Mauricio Macri que luego de emitir su voto declaró ante las cámaras que “es momento de una transición ordenada de cara al 2023”. El bunker oficialista volvió a mostrarse unido, aunque sin la presencia de su principal figura: Cristina Fernández de Kirchner había anunciado en sus redes sociales que le habían indicado reposo y por ello no estaría presente.

Luego del mensaje grabado desde Olivos, el presidente dio el presente en el búnker del Frente de Todos en Chacarita.

En 2019 asumía Alberto Fernández luego de las generales nacionales que lo catapultaba con el 48% de los votos. Parece noticia antigua, pero solo han pasado dos años y, una pandemia mediante, el electorado fuerza el cambio de rumbo político a través de los comicios. Estas elecciones se asemejan más a un plebiscito popular con foco en problemas estructurales de la Argentina: inflación, pobreza e inseguridad. Tópicos que, hasta el momento, ninguna de las fuerzas políticas tiene la receta (o la voluntad) para combatirlos.

Hernán Carnabuci