Si tuviéramos que definir qué es la música diríamos que es la combinación ordenada de ritmo, melodía y armonía, que resulta agradable a los oídos, generada a través de la voz o de instrumentos musicales. Desde la prehistoria y a lo largo de toda la historia tenemos información sobre la música en las distintas sociedades, a través de diferentes instrumentos encontrados arqueológicamente.
La palabra música deriva del griego “mousike” que significa “arte de las musas”. En la mitología griega había nueve musas que eran las diosas que inspiraron la literatura, ciencias y arte, y eran la fuente del conocimiento plasmado en la poesía, los cantos y los mitos de la cultura griega.
En la actualidad hay un montón de géneros y subgéneros tales como: rock, clásica, country, jazz, pop, trap, rap, hip hop, heavy metal, indie, etc. Y es muy difícil o imposible ver a una persona que no le genere placer o disfrute una buena canción, ya que en general a todos nos agrada o apasiona.
Además, puede servir como uso medicinal en la musicoterapia o para distintas disciplinas médicas como oncología, cuidados intensivos, pediatría, cardiología, rehabilitación o psiquiatría, como si fuera una «medicina» mágica para el paciente, que tan solo tiene que escuchar.
DÍA DE LA MÚSICA 🎼
Desde 1594, todos los 22 de noviembre se celebra, en homenaje a Santa Cecilia, patrona de la música, el idioma universal. Feliz día de la música a quienes la escriben, a quienes la ejecutan, a quienes la dirigen, y principalmente a todos los que la disfrutamos pic.twitter.com/Mj63IaM1tA— Teatro Colón (@TeatroColon) November 22, 2020
¿Por qué se festeja el 22 de noviembre?
Desde el año 1594 se celebra este día en conmemoración al fallecimiento de Santa Cecilia, considerada como “Patrona de la Música” por el Papa Gregorio XIII.
Cecilia fue una chica que vivió entre los años 180 y 230, amante de los instrumentos y fascinada por la música. Ferviente seguidora del cristianismo en una época en la cual, el Imperio Romano torturaba a cualquier persona que estuviera realizando actos en favor de Cristo.
Fue obligada por su familia a casarse con un noble pagano llamado Valeriano, a quién en la noche de bodas le comentó su amor por Dios y él apoyó su fervor, convirtiéndose al cristianismo por el bautismo del Papa Urbano.
Esta decisión le costó a Valeriano y Tiburcio, su hermano, el castigo de la persecución y la prisión, por ser descubiertos al enterrar cuerpos de cristianos en secreto. Fueron obligados a renunciar a sus creencias y forzados a adorar a Júpiter, pero ante sus negaciones recibieron la pena de muerte.
Luego fue el turno de Cecilia, que también fue arrestada y torturada al igual que su esposo para que afirmara su adoración a Júpiter y negara a Cristo, pero ella declaró que prefería la muerte antes que renunciar a su Fe. Aunque trataron de llevarla a un gran horno y sofocarla con los gases, esto no sucedió y por eso el 22 de noviembre de 230, el alcalde romano Almaquio ordenó que le cortaran la cabeza; mientras, en sus últimas palabras, ella recitaba alabanzas hacia el Señor.
¿Puede ser que el Día Internacional de la Música tenga dos festejos?
Si uno se pone a investigar en internet, descubre que no solo el 22 de noviembre es considerada la fecha para festejar este día, sino que también aparece el 1 de octubre como día internacional de la música. Igualmente las fechas varían en cada país, en algunas regiones de Europa es el 22 de noviembre, en Francia el 21 de junio, mientras que en Uruguay es el 10 de octubre.
Se consideró el 1 de octubre de 1975 como un intentó de unir a todos los pueblos a través de todas las manifestaciones artísticas, en este caso puntualmente la música, como símbolo de igualdad para que todos puedan identificarse a ella.
Esta idea surgió del Lord Yehudi Menuhin, un reconocido violinista, que buscó promover la música entre todos los sectores de la sociedad sumando los ideales de paz y amistad entre los pueblos de la UNESCO ya que en ese momento Menuhin presidía el Consejo Internacional de la UNESCO.
Las primeras celebraciones de este hecho se remontan a Escocia, en específico a Edimburgo en el año 1695, luego se fueron sumando otros países como Alemania, España y Francia. En Sudamérica, el país pionero en realizar estas festividades fue Brasil un 22 de noviembre entre 1919 y 1920, extendiéndose posteriormente por el resto de América Latina.
Ezequiel Hernan Garcia