Quino, el caricaturista argentino murió el pasado 30 de septiembre. La figura de Mafalda y tantos otros personajes recorrieron todo el mundo en honor al artista. El presidente anunció duelo nacional y ordenó izar a media asta la bandera en todos los edificios públicos.
Joaquín Salvador Lavado (Quino) llegó de Mendoza a Buenos Aires muy joven y su primer trabajo fue de asistente del humorista, Divito. Poco a poco consiguió un nombre en los medios gráficos con sus dibujos, pero sería recién en 1963, cuando una nueva línea de electrodomésticos llamada Mansfield le encargó una serie de historietas para promocionar la marca y ahí nació “Mafalda”. Lamentablemente, el proyecto no llegó a destino y la icónica figura tuvo que esperar un año en el cajón del escritorio. Sería Julián Delgado, secretario de redacción de «Primera Plana», quien le dio la oportunidad de relucir la simpática pieza de una niña que representa el respeto por la vida, los derechos humanos y la paz.
Todos los países Latinoamericanos le dieron su despedida al dibujante con emblemáticas postales de sus caricaturas y el día de ayer la embajada de Argentina en París abrió sus puertas con un afiche de Mafalda. Los diferente medios de comunicación le dedicaron extensas hojas rememorando el trabajo de Quino.