Este 29 de marzo Donald Trump, presidente electo de los Estados Unidos de América, firmará un decreto que va contra la propuesto por Barack Obama, anterior mandatario de dicho pais. El presidente visitará la sede de la Agencia de Protección del Medioambiente (EPA), ubicada a poca distancia de la Casa Blanca, donde sellará la “Independencia Energética”.
Según Trump, el decreto contribuye a la creación de empleos, la liberación de la economía y le brinda un respaldo al carbón, ya que producto de una orden anterior: «Clean Power Plan» (Proyecto para una energía limpia), el cual buscaba reducir el uso de combustibles fósiles en la generación de electricidad, muchas centrales de carbón tendrían que cerrar porque esta norma obliga a las empresas reducir un 32% las emisiones de CO2 para el 2030.
En los Estados Unidos el carbón va perdiendo peso, pero aun así es algo importante en la vida de millones de americanos. Alrededor de un tercio de la electricidad en el país es engendrada por este mineral.
Aun así, los expertos no creen que esta norma vaya a generar más puesto de trabajos, ya que la decadencia del carbón es producto de la competencia que tiene con el gas natural y los costos de exportación. La energía solar está en su auge porque es más barata junto con la eólica. Además esta industria generó 73.000 puestos de trabajo en el 2016. Por eso mismo entendidos del tema dudan que este decreto produzca algún cambio.