La encuesta “¿Cómo leemos?”, realizada previo a la pandemia, sobre el acceso a los libros y los hábitos de lectura que estamos teniendo los argentinos hoy en día reveló que está creciendo una nueva cultura en el país: Los “lectores híbridos”. Estos nuevos lectores son en aquellos que leen los libros tanto de manera física como digital.
La investigación se llevó a cabo entre diciembre de 2019 y marzo del presente año, basada en unas 7000 personas, los resultados de la encuesta fueron los siguientes: El 62% se identificó con está categoría, un 34% solo lee los libros en papel y tan solo un 4% lo hace únicamente de manera digital. Además, un 11% consume audiolibros. Con estos resultados, se puede considerar que el consumo de libros digitales es mucho mayor al 5% que estiman los estudios de mercado en la actualidad. Sin embargo, también hay que tener en cuenta una cosa: Muchos de los lectores de formato digital lo consiguen de manera gratuita (Legal o “pirata”), por lo que gran parte de esta demanda no está dispuesta a pagar para leer en este formato.
Haciendo referencia a los formatos, se considera que el libro en papel está más relacionado a un momento de “relax”. Se asocia con la desconexión, su uso durante un fin de semana o unas vacaciones y con lecturas de cuentos o novelas. En cuanto al libro digital, el mismo da la posibilidad de poder transportarlo sin problema alguno en cualquier dispositivo móvil y sin que ocupe algún lugar extra, tiene un menor precio y cuenta con la ventaja de que podemos transformarlo a formato físico si así lo deseáramos. Pese a que ambos formatos coexisten en el mundo de la lectura, la oferta de libros digitales sigue siendo reducida en comparación a la oferta en formato físico.
Ahora bien, hay que tener en cuenta que para leer en formato digital requerirá de mucha más concentración: Según los resultados de la encuesta, tan solo un 10% lo hace a través de e-reader, por lo que está lejos de convertirse en el dispositivo preferido para la lectura. La mayoría de los lectores de formato digital lo hace a través de sus smartphones, computadoras o tablets. Por está razón, aseguramos que la lectura a través de estos dispositivos requiere de una mayor concentración, debido a que no es la única función que está activa mientras leemos.
Por último, hay que tener en cuenta que esta investigación se realizó previo al aislamiento social y preventivo decretado por el Gobierno Nacional en marzo de 2020, por lo que no considera la digitalización de los catálogos de manera forzosa y apresurada de varios sellos locales para poder satisfacer a la demanda de los lectores durante este tiempo de cuarentena. En diciembre de este año se pondrá en marcha nuevamente la segunda edición de la encuesta “¿Cómo leemos?”, en la que será interesante ver como impactará este tiempo en el futuro.