La popularidad del vóley femenino argentino va creciendo a pasos agigantados. Esto se debe a la gran pasión que las jugadoras demuestran partido tras partido, así cuando no contaban con el apoyo de la dirigencia, lograron hacer historia con mucho esfuerzo. Esto comenzó con su primera clasificación a los Juegos Olímpicos Rio 2016; aunque solo tuvieron una victoria, la participación fue un gran logro. A pesar de que Las Panteras están haciendo historia, han pasado situaciones en el medio que no fueron del todo agradables, como es en el caso de Yael Catiglione (ex armadora de la selección argentina), que participó en Los Juegos Olímpicos Rio 2016, y recuerda esa gran etapa con un gusto amargo. «Habíamos clasificado a los Juegos Olímpicos a través de un esfuerzo enorme que habíamos hecho todas, pero antes del Grand Prix ya las cosas empezaron mal. Armaron un amistoso con Bulgaria en Olavarría, un viaje de ida y vuelta después de entrenar como locas en el Cenard. Llegamos detonadas a Buenos Aires para tomarnos un avión a Mendoza, de Mendoza un micro para Tucumán y que sea todo un desastre», recordó. Por esta situación de mala organización, la ex armadora le expresó entre lágrimas a Guillermo Orduna (ex director técnico del seleccionado argentino) el dolor que le causaba ver que la dirigencia no valorara el esfuerzo del equipo, cuando el seleccionado masculino recibía un trato mejor.
Hoy cuentan nuevamente con el pasaje para otra edición de los Juegos Olímpicos, que se realizaran en Tokio en el 2021, tras ser postergados por la pandemia de coronavirus. La clasificación fue en enero de este año, en el cierre del Preolímpico Sudamericano de Voleibol Femenino, en el que lograron conseguir un agónico triunfo por 3-1 frente al organizador de dicho evento, Colombia. Todo tipo de competencia no es solo importante para las jugadoras, también lo es para su entrenador: «Para mí era un gran desafío y para ellas también era algo nuevo. Sabía que iba a encontrar a un equipo que entrenaba mucho. La identidad de Las Panteras ya la tenían porque son muy aguerridas, muy agresivas y tienen un gran feeling con la gente”, indica Hernán Ferraro, que eligió dirigir a este equipo luego de ser ayudante de Julio Velasco en el seleccionado argentino de vóley masculino.
De la mano de Ferraro, Las Panteras lograron colgarse su primera medalla de bronce de la historia en los Panamericanos de Lima 2019. Hoy con otro objetivo en mente, el director técnico indica: “Tendremos un año más para trabajar, pero será difícil porque no sé cuánto podremos entrenar con la selección mayor y si habrá alguna otra competencia”. Pero Yamila Nizetich (jugadora de la selección argentina) expresó a través de su cuenta de Twitter lo siguiente: “Welcome Tokio 2021- Un gran reto para perseverar y una gran oportunidad para entrenar más y mejorar !!! Llegaremos volando!!!”. Con dos miradas distintas por esta atípica situación, ambos asumen la misma responsabilidad para poder cumplir este objetivo.
De este tipo de dificultades podemos encontrar muchas situaciones en cualquier deporte, porque no es una tarea fácil ser un deportista profesional en otro ámbito que no sea el fútbol, debido a su gran popularidad. Pero en el caso de las mujeres, puede ser una tarea un poco más compleja; por esto deciden alzar la voz en búsqueda de igualdad, para que sea equitativo, sin diferencias. En el caso de Las Panteras, deciden ir por todo, para poder dejar el sello argentino en lo más alto del podio y así lograr hacer historia. Además, cuentan con un referente como Ferraro, que en plena cuarentena deja un mensaje bastante claro para la Liga Argentina por la profesionalización del vóley femenino: “Todos queremos que la Liga sea más extensa y que las condiciones sean mejores e igual para todos, pero esto es un camino largo que queremos lograr», concluyó en una entrevista realizada por la Federación del Vóley Argentino (FeVa).
Nicole Mariana Monjes