Después de dos años de espera, Enrique Iglesias volvió al país con su tour 2018. Antes de desembarcar en Buenos Aires, el cantante recorrió Hungría, Alemania, Noruega y Brasil. Fue en el país escandinavo donde dijo; “si fuera por mí tocaría todos los días en Buenos Aires. Además, tengo muchísimas ganas de estar con mis fans argentinos que hace un tiempo largo que no veo”.
“Muchísimas gracias por estar aquí esta noche. Yo sé que he tardado mucho tiempo en regresar para Argentina”, fueron sus primeros comentarios ante las 14.000 personas que fueron a verlo en el Estadio GEBA, y que no pararon de sacarle fotos y filmarlo durante toda la velada.
Luego de una hora y media de demora, el Rey del Pop Latino salió a escena con un look urbano, el que lleva vistiendo hace tiempo.
El show empezó a las 22:40 de la jornada sabatina y culminó a la una de la mañana. Durante esas dos horas, el español logró cumplir las expectativas de sus seguidores ya que algunos pudieron tocarlo y hasta cantar con él algunas de sus canciones, como le pasó a Sebastián que viajó desde San Fernando para ver a su ídolo.
Los temas que hicieron “explotar” el ambiente fueron; “Experiencia religiosa”, “El Perdón”, “Súbeme la radio”, “Bailando”, y su último éxito, “El baño”, entre otros.
Pero la sorpresa de la noche fue cuando el madrileño interpretó una de las canciones más conocidas grabadas en inglés, “Heartbeat”, junto a la cantante y
actriz argentina, Mariana Espósito, más conocida como “Lali”.
La ex “Teen Angels” estuvo a la altura de las circunstancias y tuvo una performance hot con Enrique Iglesias ya que se puede ver una foto en la cuenta de Instagram de ella en la cual él le acaricia el abdomen.
Los fanáticos llegaron desde diferentes puntos geográficos, entre los que se destacaban, Capital Federal, el Gran Buenos Aires, el Interior del País, y países limítrofes como Chile y Uruguay.
“Me pongo esta camiseta porque amo Argentina. Sé que a veces parece que desaparezco pero mis mejores recuerdos pasaron aquí”, dijo Enrique con la camiseta de la Selección de fútbol puesta mientras los fuegos artificiales estrellaban contra el cielo porteño.
A los artistas internacionales les encanta tocar en el suelo argentino por el fanatismo, la benevolencia, la fidelidad y la generosidad que tiene el público para con ellos. El fin de semana que pasó, Enrique Iglesias aprovechó todo eso para que sus fans pasen una noche inigualable y que tengan ganas de volver a pagar una entrada por él en un futuro.
Antes de que él saliera a dar su recital, se presentaron Eloy, cantante de reggaetón puertorriqueño, y Paulo Londra, la revelación del hip hop argentino, que acumula 40 millones de vistas en sus videoclips.
El hijo de Julio Iglesias e Isabel Preysler jugó con el público, brindó por Argentina y cantó “Escape”, la canción que le permitió conocer a su pareja y madre de sus hijos mellizos, la ex tenista rusa Anna Kournikova, seis años menor que él.
Al final del show, el artista de 42 años con más de 100 millones de descargas musicales, habló de sus pequeños hijos Nicholas y Lucy Iglesias. “Los últimos tres meses para mí han sido significativos y me he dado cuenta que nunca imaginé que podía querer a dos seres humanos como os quiero a vosotras y a vosotros. De todo corazón les digo mil gracias por estar hoy aquí”, cerró el europeo tras un periodo sin venir al país.
El concierto finalizó con un juego de luces realzado por el humo que lanzaban varias máquinas dispuestas en todo el campo, y un Enrique emocionado se despedía con promesa de pronto regreso.
Sus fieles estarán esperando al ganador de un “Grammy” al mejor artista latino, cinco “Grammys Latinos”, cuatro premios “Billboard”, 43 “Billboard Latinos”, 10 “World Music Awards”, ocho “American Music Awards”, cinco “Latin American Music Awards”, 22 “Lo Nuestro”, 15 “Juventud”, 20 “ASCAP”, tres “MTV Europe Music Awards “, cuatro “40 Principales”, dos “Orgullosamente Latino”, un “Ondas” o una gaviota de plata en el Festival de Viña del Mar, entre otros.