Eric Clapton y su cuarta visita a Argentina
El pasado 14 de septiembre a sus 79 años, Eric Clapton volvió a dejar su magia en el país deleitándonos con su música, que comenzó con “Sunshine of Your Love”, de Cream, el primer hit de su carrera al que le seguirían tantos otros clásicos. En una oleada de blues, notas que bajaban desde su guitarra con tintes de melancolía, y en ocasiones brindando una sonrisa hacia el público, hizo que la noche del sábado 14 de septiembre haya temblor en la Ciudad de Buenos Aires. Clapton es, además, la suma de sus músicos que arman la pieza final que regalan a sus seguidores: Nathan East en el bajo, Sonny Emory en la batería, los tecladistas Chris Stainton y Tim Carmon y Doyle Bramhall II tocando notas minuciosas con su guitarra, a la par de Eric.
Beatle por un día
Raro era pensar un quinto integrante a la ya reconocida banda The Beatles, pero en 1968 Eric Clapton fue el primer gran artista en realizar un tema en conjunto con el cuarteto. Nada de esto fue al azar, mas bien fue la amistad que los unía a George Harrison y Clapton, quien ayudó al Beatle a grabar uno de sus mejores aciertos, «While My Guitar Gently Weeps».
Pocos eran los temas compuestos por Harrison en la banda ya que la mayoría de las canciones las componían John Lennon y Paul McCartney sin darle, tal vez, el lugar que él esperaba. En un principio el tema no tomó relevancia en el grupo lo que llevó al miembro más joven de la banda a alzar su voz de una manera distinta. Así fue como Harrison invitó a su amigo Eric Clapton a interpretar el solo de la guitarra, lo que a un principio consiguió un no como respuesta ya que un quinto Beatle no era de acostumbrarse, pero no tardó en aceptar la invitación. La llegada de Clapton hizo que todo fluyera, John tocó una bonita introducción al piano y todo lo demás se fue dando armoniosamente. Tal fue el impacto y la química que surgió entre ellos que un año más tarde, en 1969 cuando los Beatles grababan «Let It Be», habían tenido en consideración integrarlo a la banda luego de tensos cruces del grupo con Harrison, lo que no llegó a consumarse.
Wonderful Tonight
Si imaginamos una escena romántica, un boda de películas o una beso bajo la lluvia, podemos imaginarnos que está sonando «Wonderful Tonight», un clásico romántico escrito en 1976 que luego sería incluida en el álbum «Slowhand». Esta pieza delicada lleva la dedicación y la inspiración del amor, describe casi tangiblemente lo que observaba frente a él, un hombre rendido a la belleza de una mujer. Poco se sabe de este himno que llegó al cine en la película, «La historia de nosotros», protagonizada por Bruce Willis y Michelle Pfeiffer, pero sabemos que encaja a la perfección, como piezas de un reloj suizo. Patty Boyd es la musa detrás de este hit, conocida por ser expareja de George Harrison, mejor amigo de Clapton.
Mientras Boyd se arreglaba y maquillaba para asistir a un evento, Eric impaciente y observando mientras Patty se probaba vestidos comenzó a tocar los acordes de la canción. En una entrevista en The Guardian, Patty contó su propia versión: «Eric estaba sentado tocando su guitarra mientras me probaba los vestidos en la zona de arriba, estaba tardando mucho y entré en pánico por mi cabello, mi ropa, mi maquillaje, y cuando finalmente bajé las escaleras, él estaba ahí esperando con su guitarra y comenzó a cantarme…».
Tears in Heaven
Como un antídoto así funcionó la música en Clapton luego de la muerte de su hijo Conor en 1991. Luego de varios años de lucha contra el alcohol y las drogas, muchos pensaron que recaería en sus viejos hábitos, pero para suerte de todos la música fue su salvavidas. El dolor lleva a las personas a reconvertirse, a buscar una salida, y así fue como componer hizo de su dolor una respuesta. «Tears in Heaven» se publicó en 1992 en el álbum «Rush» que no tardaría en vender millones de copias. En 2013 la revista The Rolling Stones le pidió a los lectores que indiquen la canción mas triste de la historia y ésta fue la se llevó el primer lugar.
Clapton no escapa de su dolor y en sus primera líneas expresa lo que un padre jamás quisiera pasar: «¿Sabrías mi nombre si te viera en el cielo? ¿Sería lo mismo si te viera en el cielo? Debo ser fuerte y seguir adelante, porque sé que mi lugar no está en el cielo…”
Hoy con un recorrido por la vida de los más completos, Eric Clapton no solo disfruta de seguir estando arriba de escenarios, también disfruta el poder levantarse todos los días y saber que pudo con el dolor, el dolor de la muerte de un hijo, el dolor que producen las drogas, el dolor que produce vivir.
Martin Maschio