La historia del chocolate, un manjar que el 13 de septiembre celebra su día mundial, se remonta a las antiguas civilizaciones mesoamericanas, como los mayas y los aztecas, quienes consumían una bebida amarga llamada «xocoatl», la cual estaba hecha a partir de granos de cacao. Considerado un alimento sagrado, el cacao se utilizaba en rituales y como moneda de intercambio.
Cuando los conquistadores españoles llegaron a América en el siglo XVI, llevaron el cacao a Europa, donde la bebida fue adaptada, endulzada y aromatizada. El chocolate sólido no apareció hasta el siglo XIX, cuando técnicas industriales permitieron su producción en masa. En 1847, la primera tableta de chocolate fue creada en Inglaterra, marcando el inicio de su popularización a nivel mundial.
El chocolate en Argentina tiene sus inicios a finales del siglo XIX y principios del XX, cuando los inmigrantes europeos, especialmente italianos y suizos, trajeron sus tradiciones chocolateras al país. Fue en la región de la Patagonia, específicamente en San Carlos de Bariloche, donde la producción de chocolate artesanal comenzó a consolidarse.
Estos son algunos de los mejores lugares para probar chocolate en nuestro país:
Cauca
Originaria de Trenque Lauquen, Cauca inició su actividad en 1928 con una fábrica de chocolates y caramelos, que rápidamente se ganó la preferencia local gracias a la calidad de sus productos. Actualmente, tienen varios puntos de venta donde se pueden disfrutar sus emblemáticas tabletas de dulce de leche, barras de chocolate, alfajores, galletas y bombones en diversas presentaciones, entre otras exquisiteces.
La Pinocha
Su historia comienza en 1995, cuando dos familias amigas decidieron unirse en un proyecto común: elaborar chocolates en medio del bosque. Así nació esta icónica chocolatería en Mar de las Pampas, reconocida por sus chocolates artesanales de alta calidad y una exclusiva variedad de sabores. Entre los favoritos se encuentran: el Chocolate de Café, con relleno de licor de café; la Crema de Coco, que combina una suave crema de coco con una fina capa de chocolate blanco; Pimienta de Jamaica, un chocolate 60% con licor y toque de pimienta jamaicana; el milhojas de chocolate blanco con dulce de leche; el Suizo, una mezcla de chocolate blanco, dulce de leche y nueces tostadas; el chocolate amargo 80% con almendras tostadas.
Mamushka
Es una de las chocolaterías más apreciadas, no solo en Argentina, sino a nivel mundial. En 2019, fue galardonada con el «International Chocolate Awards América» y el «Americas Bean-to-Bar and Chocolatier Competition», entre muchos otros reconocimientos. En Mamushka, seleccionan personalmente los ingredientes y el cacao para la elaboración de sus chocolates artesanales. Una vez escogidos meticulosamente los granos de cacao, se importan a San Carlos de Bariloche, donde continúa el proceso de producción. Entre los productos más destacados del menú de Mamushka están las Trufas de Chocolate Negro.
Rapanui
La historia comienza en Italia, a principios del siglo XX, cuando Aldo Fenoglio, heredero de una tradición familiar de elaboración artesanal de chocolate, vivía allí. En 1948, Aldo y su esposa Ines se trasladaron a San Carlos de Bariloche, donde abrieron la primera chocolatería artesanal de la ciudad, llamada Tronador. Años después, su hijo Diego, quien a los 18 años ya compartía la pasión y la dedicación por el chocolate, fundó una nueva chocolatería en Bariloche, conocida como Rapanui, y desde entonces ha crecido enormemente. Hoy en día, produce 90 toneladas de chocolate al mes y vende 175.000 potes de Franui por semana. Además, la empresa ha iniciado un proceso de transformación para crear productos sin TACC y opciones aptas para veganos. Entre los productos más populares destacan los Franui, frambuesas patagónicas cubiertas en dos tipos de chocolate; los Nocciolato, barras de crema de cacao y avellanas con avellanas enteras; y los tradicionales Marroc.
Agustín Potenza, 2° A TT