A partir del 1° de septiembre, el Gobierno Nacional efectivizó la quita de subsidios al transporte público en el Área Metropolitana de Buenos Aires, y retiró los subsidios vinculados a la Red SUBE a aquellas líneas de colectivos cuyos recorridos no vinculen la Provincia de Buenos Aires con Ciudad de Buenos Aires. La Secretaría de Transporte anunció que el Estado Nacional seguirá subsidiando solo a las 113 líneas de colectivo de jurisdicción nacional; estas empresas de transporte automotor son las que circulan vinculando el conurbano con CABA. Del mismo modo, se ratifica que continuará la financiación hacia todas las líneas ferroviarias del AMBA.
Las líneas de jurisdicción nacional que seguirán gozando del beneficio son: 1, 2, 8, 9, 10, 15, 17, 19, 20, 21, 22, 24, 28, 29, 31, 32, 33, 37, 41, 45, 46, 49, 51. 53, 55, 56, 57, 59, 60, 63, 67, 70, 71, 74,75, 78, 79, 80, 85, 86, 87, 88, 91, 92, 93, 95, 96, 97, 98, 100, 101, 103, 105, 110, 111, 113, 114, 117, 119, 123, 124, 126, 127, 128, 129, 130, 133, 134, 135, 136, 140, 143, 145, 146, 148, 150, 152, 153, 154, 158, 159, 160, 161, 163, 164, 166, 168, 169, 172, 174, 176, 177, 178, 179, 180, 181, 182, 184, 185, 188, 193, 194, 195.
En lo que respecta a la CABA, quedaron 31 líneas de transporte de colectivo sin subsidio, mientras que, en el Conurbano, el número asciende a un total de 377. Esto incluye a los números que van desde el 200 al 499 y las líneas que parten desde el 500 en adelante, las cuales pertenecen a las líneas municipales inscriptas para dicho fin.
Esta decisión afectará los bolsillos de los usuarios del transporte público, ya que si por ejemplo un pasajero realizaba un viaje con un recorrido de 3 a 6 kilómetros en tres combinaciones de colectivo, sin ser de jurisdicción nacional, abonaba un total de $ 723,52, por lo que, con la nueva resolución, ese monto aumentará a $ 1.240,32, sin importar si entre uno y otro hubiese transcurrido menos de dos horas, ya que los mismos fueron eliminados del beneficio.
El Sistema Único de Boleto Electrónico (SUBE) fue creado un 19 de junio del 2009, en el gobierno de Cristina Fernández, como una tarjeta que sirva como medio de pago para viajar en colectivos, ferrocarriles, subtes, metrobuses, trolebuses y lanchas en 61 localidades de todo el país. Esta tarjeta es similar a las implementadas en otras ciudades de gran densidad de población como Rosario, Córdoba, Salta, San Miguel de Tucumán o Posadas en nuestro país, o como en París, Londres, Río de Janeiro, Hong Kong, Seúl o Asunción en el resto del mundo.
En enero del 2018, en el gobierno de Mauricio Macri, se sancionó la Red SUBE, el cual es un sistema que consiste en que cada vez que se viaja en un transporte público del AMBA se realiza un descuento de la tarifa, siempre y cuando se encuentre dentro de una ventana de dos horas entre viaje y viaje. El primero se abona completo, mientras que en el segundo se reintegra el 50% del boleto mínimo y desde el tercero, un 25% del valor. Este esquema ahora quedará solo para las líneas de jurisdicción nacional.
El mantenimiento del programa de descuentos de la Red SUBE tenía para el Estado Nacional un costo de $ 1.500.000 por mes. Según informó el Gobierno, el monto de la quita de estos fondos será reasignado, pero no especificaron a qué otra área. Por otro lado, la Tarifa Social seguirá
vigente por el momento para más de 5.300.000 de personas, las cuales acceden a un descuento de 55% del valor del boleto. Tanto CABA como Provincia de Buenos Aires se encuentran muy preocupados en busca de una solución para millones de usuarios, los cuales se verán afectados por esta decisión. El ministro de Transporte de la Provincia de Buenos Aires, Jorge D’Onofrio, refirió que para que la provincia se haga cargo de esta situación, debería desembolsar estimativamente $1.300.000.
Se trata de un tema muy sensible, que como siempre, afecta al trabajador, por lo que se espera una pronta resolución de todos los responsables, para calmar las inquietudes de todos los pasajeros.
Carlos Guillermo Vega, 2°A TT