Nicolás Ricci es un joven de 21 años que pertenece a la Selección Argentina de natación paraolímpica, con múltiples presencias en Mundiales, Parapanamericanos y otros campeonatos internacionales.
De su actualidad conversó con Pirámide Invertida, ante la proximidad de su próximo desafío en los Juegos Paralímpicos de París 2024.
-¿Cómo llegaste al deporte y al nivel competitivo?
-Vengo de una familia de deportistas. Mi viejo fue jugador profesional de básquet, mi tío también, mi hermano jugó en la selección de 3×3 hasta hace poco. Yo me crié en ese mundo. Desde muy chico hice natación a nivel terapéutico y rehabilitación. En un momento me harté porque yo quería hacer algo competitivo, imaginate que yo iba a ver todos los fines de semana a mi hermano jugar y veía la figura de mi viejo y yo quería hacer algo también. Probé muchas cosas pero nada me llenaba tanto, pero un día en una heladería a una cuadra del CeNard (Centro Nacional de Alto Rendimiento Deportivo) me encontré a mi entrenadora que estaba con los chicos en una concentración. Me invitó a entrenar y el primer día me mostró un video de un compilado de los Juegos Paralímpicos y me dijo “yo con vos quiero llegar a esto.
-¿Cómo es un día tuyo? ¿Trabajás y/o estudiás) ¿Cómo lo organizás con los entrenamientos?
-Mi día arranca más o menos a las 5:30, porque entrenamos a las 7 en el Cenard o a las 8 en River, dependiendo el espacio. Voy al Cenard, llego más o menos 6:30 para estar menos cuarto entrando en calor, a las 7 entramos al agua hasta las 10 aproximadamente. Después voy al gimnasio donde estoy hasta las 11 y media, solo dos o tres veces por semana, dependiendo el entrenamiento en el que estemos. En este momento no estoy haciendo doble turno, pero en todo caso volvería entre las 3 y 4 de la tarde. Estoy estudiando y estoy becado por la Secretaría de Deportes y el Enard, con un programa para que los deportistas de alto rendimiento tengamos la oportunidad de estudiar. Tiene convenios con universidades privadas, por lo tanto, becado, estudio Derecho en la Universidad de Palermo. Lo voy llevando bien, porque intento hacer pocas materias, para de esa manera poder llevar a cabo la práctica deportiva y los entrenamientos.
-¿En qué se basa tu entrenamiento tanto en el agua como afuera?
-La estructura de mi entrenamiento dentro del agua se basa en una entrada en calor, un trabajo principal, que generalmente es tomado con cronómetro y una vuelta a la calma. La entrada en calor es más técnica y el trabajo principal depende del momento en el proceso en el que estemos, puede ser de resistencia, potencia, velocidad, de producción y acumulación de ácido láctico, es un entrenamiento convencional de natación pero se adapta a las necesidades de cada nadador. Afuera del agua, yo entreno con mi preparador físico, Mario Mouche, en un gimnasio en Vicente López. De acuerdo a mi patología y la espasticidad que tengo no puedo levantar tanto peso, tiene que ser algo muy controlado, le damos mucha importancia a la parte de coordinación utilizando la neurociencia, que sirve mucho con mi patología. A su vez tengo kinesiólogo, osteópata y masajista. Obvio no me quiero olvidar, que es muy importante, el psicólogo deportivo que es clave y hoy en día en el deporte se está hablando mucho más de la salud mental y a mi me ayudó mucho a potenciar mi rendimiento tanto afuera como adentro del agua.
Ricci tuvo una parálisis cerebral que fue producto de la prematurez, ya que nació a las 27 semanas de gestación. Debido a esto padece de ECNE (Encefalopatía Crónica No Evolutiva), lo cual produce espasticidad y tono muscular alto que afecta tanto en miembros inferiores como en miembros superiores. Esto no impidió que en la natación encuentre su mundo, la oportunidad de seguir el legado deportivo de su familia.
-¿Quiénes son tus entrenadores o tu cuerpo técnico?
-Mis entrenadores de natación son Marcela Belsivo y Joaquin Felipe, el preparador físico es Mario Mouche, el psicólogo deportivo, Eduardo Fernández y el kinesiólogo, Carlos Touceda.
-¿Dónde te entrenás y cómo te movilizas?
-La parte de agua la entreno en River o en el Cenard, varía. La preparación física en un gimnasio en Vicente López, en el Club Náutico de Caza y Pesca Manuel Belgrano. Kinesiología tengo en mi casa, ya que vienen a domicilio. En este momento me manejo en remis, gracias a mi vecino que me hace la segunda. Pero estoy practicando para aprender a manejar y dentro de poco sacar el registro. No uso transporte público ya que no todos están adaptados para movilizarse en la silla de ruedas o el andador.
–¿En qué te especializás?
-Mi prueba principal son los 50 metros estilo espalda, por eso soy velocista. También nado 50m pecho y 150m combinados, es 150m por que en las categorías más bajas, donde el nadador tiene mayor discapacidad, no todos nadan los 50m de mariposa por que tiene mucho uso de piernas, por lo tanto se saca esta prueba y quedan 50m espalda, 50m pecho y 50m libre.
-¿En qué competencias participaste y cuál es la que más te marcó?
-Yo participé en los Mundiales de Madeira 2022 y de Manchester 2023, en los Parapanamericanos de Lima 2019 y Santiago 2023 y en el Parapanamericano Juvenil de Sao Paulo donde conseguí dos medallas de bronce en 50m libre y 50m espalda, que fue mi primera competencia internacional con la selección argentina. También en 2021 clasifiqué a los Juegos Paralímpicos de Tokio. La clasificación la conseguí en la World League de Berlín, participé en muchas: España, Italia, Inglaterra, Alemania. La que más me marcó fue esta última ya que conseguí la clasificación a Tokio, luego no me llevaron pero fue la más significativa.
–¿Cuáles fueron tus mejores marcas?
-Para que tengas una referencia, unos 50m míos son un 100m de un nadador convencional. Yo soy categoría 4, estas van de 1 al 10, donde 1 es el más afectado y el 10 es el menos afectado y muchas veces el categoría 10 pasan tiempos similares a los de un nadador convencional. Un panel de clasificadores es el que asigna las categorías. El nadador tiene tres clasificaciones: “S” que equivale para los estilos libre y espalda, la “SB” que equivale para pecho y la “SM” que equivale para las pruebas de combinado. Yo soy “S4”, “SB3” y “SM4”. Mis mejores marcas fueron en 50m espalda, 50.24 en el Panamericano de Santiago 2023; en 50m pecho en el 1m02 77 en el Campeonato Nacional 2024 y en 150m combinado, 3.10 en el Panamericano de Santiago 2023.
–¿Recibiste apoyo para asistir a las competencias tanto del Enard como de otras instituciones?
Si, estoy becado por parte del Enard y por la Secretaría de Deportes, nos apoyan y ayudan a que podamos asistir a los torneos.
–¿Sacrificás o sacrificaste mucho para dedicarte al deporte?
-Sí, sacrifiqué más de chico. Soy miembro de la selección desde los 14 años, al principio vivís una adolescencia diferente, tenés que tomar decisiones, pero bueno son los sacrificios del alto rendimiento, es así. Como por ejemplo que el sábado tengas que entrenar temprano y el viernes a la noche tengas que estar durmiendo y no poder juntarte con tus amigos. Hoy en día no siento que estoy sacrificando por qué es la vida que elijo. Al fin y al cabo es lo que uno elige.
–¿Sufriste algún episodio donde el nerviosismo, la ansiedad o la exigencia te haya afectado?
-Sí, creo que a todo deportista de alto rendimiento es imposible que no le aparezca nervios, ansiedad y la autoexigencia muchas veces juega en contra. Trabajo semanalmente con un psicólogo deportivo, me ayuda un montón, porque muchas veces aparece la ansiedad, la incertidumbre, la frustración cuando los resultados no salen. Saber manejarlo es clave para poder alcanzar el mayor rendimiento y saber manejar los nervios y la presión y que no se hagan presentes a la hora de competir o entrenar.
–¿Cuál fue tu mayor logro hasta el momento? ¿Cuál es tu próxima meta?
-Mi mayor logro fue la clasificación a Tokio, pero no me llevaron , ya que quedé afuera en el último corte, porque había más nadadores que plazas. Mi próxima meta es el Mundial de Singapur 2025, ya que me quedé afuera de París. Como meta o logro es poder clasificar y asistir a un Juego Paralímpico.
-¿Tenés competencias por asistir?
-Tengo competencias por asistir pero este año está todo concentrado en París, así que tengo que esperar al año que viene con el Mundial.
Nahuel Escobar, 2° A, turno tarde