Ser un profesional cuando solo esperás el timbre del recreo
La niñez es la etapa más linda de la vida, porque carece de responsabilidades e inquietudes. Éste no es el caso de León Medero, el infante pampeano que por su gran talento para el ajedrez tuvo que dejar de ser un niño y convertirse en un profesional. Él representa a muchos chicos que toman demasiado en serio algo que debería ser un Juego a contemplar por su corta edad.
En etapa de jardín aprendió a mover las piezas, gracias a su padre, que le enseño como lo hiciera cualquier persona, pero León era diferente, veía más allá, su interés por juegos matemáticos no eran los normales, por eso decidieron ponerle un entrenador personal y así nació una estrella.
En palabras de su padre escuchamos el esfuerzo y dedicación de esa decisión. Todo lo que tuvo y tiene que dejar para ser lo que es. La vida de un niño que piensa en grande. León Medero, un verdadero pequeño gigante.
Una producción especial de: Sergio Mendoza, Santiago Villagra, Daira Castro y Alejandro Echevarría.