Según información del último informe del RENABAP (Registro Nacional de Barrios Populares) realizado con Techo Argentina y otras organizaciones de la sociedad civil, en todo el ancho de Argentina hay 6467 barrios populares que ocupan 684 kilómetros cuadrados, cuando la superficie porteña apenas supera los 200 km².
El RENABAP es un relevamiento que se realiza en todo el territorio argentino para detectar las necesidades de la población y dar combate a estas con políticas públicas de integración social y urbana, este documento se realiza año tras año. Es coordinado en simultaneo por la Secretaría de Integración Social y Urbana de la Nación.
La pobreza en la Argentina es muy grande y se expande a mas no poder y, al cierre de este año, marca que es mayor que en diciembre pasado, al alcanzar el 40,1% de la población. El contexto del país no ayuda, ya sea en el ámbito político, económico y social, los datos que se dan a conocer son devastadores. La desigualdad se concentra en las villas, asentamientos y barrios populares de toda la Argentina, que en total ocupan una superficie tres veces más grande de la que de la ciudad de Buenos Aires.
Primeramente, para entender la situación se considera barrio popular/de emergencia a todo conjunto habitacional y urbanizaciones informales que se constituyeron mediante distintas estrategias de ocupación del suelo, que presentan diferentes grados de precariedad, un déficit en el acceso a los servicios básicos y una situación irregular en la tenencia del suelo. Además, los núcleos de viviendas deben contar con un mínimo de nueve familias, con la mitad de sus habitantes sin título de propiedad, ni acceso formal a al menos dos de los servicios básicos, como lo son las prestaciones de energía eléctrica, gas natural, agua corriente, red cloacal.
La desigualdad en esos barrios expone las necesidades de sus habitantes. En el 66% de los casos, las personas no tienen acceso formal a la energía eléctrica, el 92% no tienen agua potable de red, el 97% no cuentan con cloacas y el 99% no accede al gas natural, sino que se abastece con garrafas.
En esta situación viven al menos 1.200.000 familias y un estimado de 5.000.000 de personas, con una mayor concentración registrada en las provincias de Buenos Aires (2065 barrios populares), Santa Fe (469), Chaco (442) y Misiones (413). En la ciudad de Buenos Aires se registraron 49.
Es una buena noticia contar con información actualizada sobre la situación de las personas que viven en barrios populares. Lo que es fundamental ahora es que Estado, sociedad civil y sector privado, de manera articulada, trabajemos para responder a la pregunta: ¿qué podemos hacer para que los 5.000.000 de personas que viven en barrios populares tengan la oportunidad de salir de la situación de vulnerabilidad en la que están?”, se preguntó Juan Maquieyra, Director Ejecutivo de Techo Argentina.
Techo como unidad ejecutora también hizo un relevamiento sobre esta situación, teniendo el mismo resultado: que aumentó notablemente la superficie de los barrios populares; y la conclusión determina que hubo una importante crecida en los últimos años. En diciembre de 2016 la superficie total era de 611 km² y, dos años después, en 2018, llegó a 643 km². En 2020 trepó hasta los 671 km² y, en 2023, se encuentra en 684 km². La tendencia indica un crecimiento de un 2,06% anual, superior a la media de 1,47% que tiene de crecimiento medio anual de las principales ciudades argentinas.
“En momentos de restricción económica como estos, además de aumentar los montos de la Asignación Universal por Hijo (AUH) y Tarjeta Alimentar, es fundamental invertir en vivienda e infraestructura en los barrios populares. Nadie puede educarse, conseguir un trabajo y desarrollar su libertad si no tiene una casa donde dormir, comer y cuidar a su familia”, opinó Maquieyra, por los anuncios realizados por el gobierno del presidente Javier Milei.
Franco Zalazar, 2° A TT