Diego Schwartzman tenía un debut complicado en Shanghái, donde enfrentaba a un joven y difícil Luca Van Assche. Sin embargo, pese a perder el primer set, el Peque sacó a relucir toda su jerarquía y logró quedarse con una victoria importantísima para avanzar a la segunda ronda.
El primer set del Peque fue muy flojo. Le quebraron el saque tres veces y tuvo muchos errores no forzados. El francés mostró un buen nivel y cerró 7-5.
En el segundo parcial, el argentino mostró otra cara. Empezó a ganar más puntos con el servicio, cometió menos errores forzados y en un momento clave, estando arriba 4-3, le quebró el saque a Assche. Así las cosas, cerró con su servicio y se llevó el set por 6-3.
Se esperaba más paridad en el último set, ya que ambos definían su futuro. Pero, pese a que Diego empezó perdiendo 2-0, no le afectó para nada ya que, a partir del tercer servicio logró quebrar el saque del francés y se quedó con todos los games. Mucho tuvo que ver la gran contundencia y la bajísima estadística de errores no forzados. Con esto, el argentino terminó cerrando el partido de muy buena manera por 6-2.
Esta victoria es sin duda muy importante para la confianza del Peque. No solo por cómo logró imponerse en el partido, sino por la calidad del rival, que tiene tan solo 19 años y es el número 66 del mundo.
El próximo encuentro será mucho más complicado, ya que se enfrentará al checo Jiri Lehecka, que se encuentra en la posición número 27 del Ranking ATP. Sin embargo no es un adversario imposible para Diego, sobre todo por la recuperación que está demostrando el argentino en estos últimos meses.
Lucas López – 2ºA Turno Mañana