En los últimos años, la Selección Argentina de fútbol femenino expermientó una importante evolución. En 2019, lograron clasificar por primera vez en la historia al Mundial de Francia, donde alcanzaron los octavos de final. Ese mismo año obtuvieron la medalla de plata en los Juegos Panamericanos de Lima.
Sin embargo, el equipo aún tiene desafíos por superar para llegar a lo más alto. Uno de ellos es la todavía muy reciente profesionalización del fútbol femenino en nuestro país, lo que dificulta el desarrollo y la preparación de las jugadoras para competir a nivel internacional, en comparación con otros países como Estados Unidos o Alemania.
Otro desafío es la falta de apoyo y reconocimiento a nivel institucional y mediático, lo que se traduce en un menor financiamiento y visibilidad para el equipo.
A pesar de estos obstáculos, el equipo ya demostró su talento y capacidad de superación en la cancha. Con jugadoras como Estefanía Banini, Soledad Jaimes o Vanina Correa, la Selección ha logrado competir a un nivel cada vez más alto.El 20 de julio inicia un nuevo sueño: el Mundial de Australia 2023. La «Albiceleste» integra el grupo G y será rival de Suecia, Sudáfrica e Italia. El gran debut será ante esta última el lunes 24.