Desde aquella banda «Cumbia Pop» hasta hoy pasaron ya treinta años, donde Marcela creció y redescubrió sus dotes como cantante, pero sobre todo como escritora. El arte de la composición le salía naturalmente en cualquier momento, y debía de registrar sus ideas sea como sea. De esta manera, Morelo contó cómo fue el proceso de Corazón Salvaje, el éxito que la acompaña recital por recital desde su creación: «Iba viajando en el colectivo 160 de Lanús y se me vino la canción a la mente y no me la pude olvidar más. Llegué corriendo y fui a mi grabadora a registrarlo«. Este hit, al principio no iba a ser incluido en su primer disco Manantial, que iba a ser lanzado en Sony Music. «Cambió el presidente de la compañía y vino un español, Carlos San Martín, que me dijo que al álbum le faltaban dos canciones. Nos acordamos de Corazón Salvaje cuando la grabamos para Cumbia Pop; cuando la escuchó me dijo que a los españoles les iba a encantar mi disco y así fue. Fue la última canción que entró en el disco, pasó a ser el primer single, pegó un portazo, se metió en la radio, me llevó a España y me abrió las puertas«, contó Marcela junto con su marido y productor Rodolfo Lugo, y ambos siguen trabajando con Sony, donde se ha convertido en un emblema y figura respetada en el círculo.
De su propia creación salieron todas sus canciones y por eso pertenece a la Sociedad Argentina de Autores y Compositores (SADAIC), donde año tras año se ganó su lugar y respeto; al día de hoy, se encuentra en un cargo en la parte del directorio, donde tiene su propia oficina. Allí, es parte de una gran comunidad donde ella cuenta que aprende día a día y que, también, para ser parte tenés que tener conocimiento de lenguaje musical y teoría.
En su carrera ha colaborado con muchos artistas y reflexionó sobre las experiencias que le quedaron marcadas para siempre: «Colaborar con un artista siempre es muy nutritivo, queda no solo una relación, sino también una canción que nos va a unir para siempre. Eso es algo alucinante y no se puede forzar, se tiene que dar. Esta es la época de los feats, y a mí me encanta«. Marcela relacionó sus prácticas en el mundo musical moderno con los nuevos artistas: «Las nuevas generaciones hicieron mucho para que esto surgiera, y yo estoy abierta a todo, si llegara una colaboración con uno de los artistas jóvenes, por supuesto que me encantaría hacerla porque siempre se aprende». Si bien no es tarea fácil adaptarse a las producciones de hoy, junto con su marido Rodolfo se conectan cotidianamente con la industria y son grandes conocedores de las súper producciones; además, sus tres hijos los llevan a estar continuamente sabiendo la actualidad de la música. «Se trata de un cambio muy grande y hay cosas que me gustan mucho. Es impresionante cómo escriben los chicos, la espontaneidad de tirar letra en el momento con lo que tienen alrededor. Creo que otros artistas argentinos no hemos podido trascender tanto en el mundo como estas nuevas generaciones, y eso es increíble», reflexionó la cantante que mostró gran capacidad para adaptarse rápidamente pero sin abandonar su esencia y sin dejar su lugar trascendental en la música argentina. En conclusión, hizo ímpetu en las grandes diferencias que hay en cuanto a hoy y hace décadas atrás, ya que los recursos económicos y de materiales musicales y electrónicos eran más escasos, por la tanto el recorrido era algo más laborioso.
Marcela siempre ha creído fervientemente en su manera de escribir y jamás la ha cambiado. Para ella es importante sentir, sentir su día a día, sentir sus enojos y alegrías, sus discusiones, etcétera. De esta manera le ha regalado a su público increíbles obras de amor y desamor, que cada uno de ellos toma como propias cada vez que las escuchan. «Tengo muchas ganas de seguir adelante, de repasar estos 25 años, pero también de mostrar mi nueva música«, confesó. Es un hecho que Morelo seguirá creando música y rondando por el mundo con su enorme equipo de trabajo que la acompaña en estos 25 años de pura melodía, pero que el recorrido no se resume a esas dos décadas y media, sino que desde que es muy pequeña salió en búsqueda de lo que soñó ser.