El actual ministro de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Jorge Macri, lanzó una idea en su cuenta de Twitter en la que plantea si los dispositivos táser pueden ser un mecanismo de defensa legal para las mujeres amenazadas de muerte.
Jorge Macri explicó los motivos de su idea y comentó que semanas atrás una mujer fue asesinada por su ex pareja cuando llevaba a sus hijos al colegio y recibió un disparo del sujeto. Otro caso similar ocurrió el año pasado donde un hombre ingresó al domicilio de su ex pareja y la apuñaló, luego la policía llegó al lugar del crimen y encontraron el botón antipánico tirado junto a la víctima. El ministro de gobierno de la Ciudad llegó a la conclusión que la gran mayoría de asesinatos a mujeres se repiten con características similares y se preguntó: “¿Esas mujeres podrían haber tenido un arma menos letal a su alcance para defenderse? ¿Deberían tener acceso a ellas todas las mujeres que tienen denuncias de amenazas registradas en la Justicia?”.
Macri comentó en su red social que mantuvo con Alexander Polit, director regional para Latinoamérica y el Caribe de Axon, fabricante de táser, y le pregunto sobre el uso civil de esta arma a lo que Alexander le respondió que existe una para los ciudadanos y se llama Táser Bolt 2. Está dispositivo, a diferencia de la versión policial, es de menor tamaño y tiene un alcance más corto.
El funcionamiento del arma es el siguiente: Disparar 2 dardos que descargan energía con una duración de 30 segundos (25 segundos más que la versión estándar). Esta adición de tiempo tiene como fin que la víctima tenga un mejor margen de escape. Además, se quiere vincular este dispositivo con una aplicación que cuando se use el taser, activara un mensaje de alerta con la localización donde fue utilizado el arma y también se enviaría un llamado de emergencia al 911 para que la policía acuda de inmediato al lugar. El táser Bolt 2 no es un arma ofensiva, sino de huida. Por lo tanto, el procedimiento correcto para utilizarla no es atacar al hombre cuando este inmovilizado por el bloqueo muscular que provoca, sino es disparar, tirar el arma y huir lo más lejos, la policía llegará de inmediato al lugar y se encargará de la persona.
Macri contó que en EE.UU el uso de estos dispositivos está aprobado en 49 estados. Polit también le dijo que en México y Colombia se estudian proyectos de ley para que las mujeres amenazadas puedan tener un último recurso de defensa.
“En Argentina tenemos mujeres amenazadas que viven angustiadas ante la posibilidad de ser atacadas sin tener la oportunidad de defenderse y una lista dramática de femicidios que demuestra la peligrosidad de este tipo de amenazas” expresó el funcionario de la Ciudad. En nuestro país hubo 233 femicidios en 2022 según un informe que brindó la organización de Mujeres de la Matria Latinoamericana (MuMalá) eso da un aproximado de 19 femicidios por mes, además se agregan un total de 425 intentos de asesinato de varones a mujeres.
El primo del ex presidente comentó que ya es hora de proponer ideas distintas o soluciones nuevas, que las personas merecen tener una oportunidad de autodefensa y que, si se sigue debatiendo o cuestionando estas ideas de defensa, se posterga el análisis técnico y las decisiones pragmáticas que podrían salvar vidas: “Tenemos que estar abiertos a pensar todo sin prejuicios”, concluyó Macri.
Esta reflexión de ministro de la Ciudad de Buenos Aires trajo opiniones bastantes divididas de los ciudadanos en las redes sociales. Algunas mujeres apoyan esta decisión ya que se sentirían más seguras, en cambio otras piensan que, en vez de armar a las mujeres, se mejore la seguridad en el país, el Estado debería encargarse de la protección de las personas. Otro grupo de ciudadanos sostienen que un taser en manos equivocadas podría ser un arma muy efectiva para los robos entre otras cosas, además, que el costo de importación de estos dispositivos tienen un precio muy elevado. Las opiniones siempre son muy diversas y la realidad es que todavía no hay un proyecto presentado sobre la portación de armas para defensa personal.
Alejandro Echeverría