Estados Unidos siempre se destacó por ser la principal potencia en el mundo del básquetbol y esto quedó ratificado -una vez más- con la selección femenina, la cual venció con comodidad a su par de China por 83-61, en un partido disputado este sábado en Sydney.
La figura del equipo fue la pívot A’ja Wilson, quien se despachó anotando 19 puntos. Las otras que también se destacaron fueron la base Kelsey Plum -anotó 17 unidades- y Jewell Loyd con 11. La supremacía de las norteamericanas se vio durante todo el encuentro, en el cual se fueron al entretiempo con una ventaja de diez puntos (43-33).
Esta diferencia de nivel se mantuvo en los últimos dos cuartos, ya que Estados Unidos continuó imponiéndose en todos los aspectos de la cancha ante un seleccionado chino que no llegaba a la instancia final desde 1994, edición en donde también se quedaron con la medalla de plata. De esta forma, alcanzaron el oro en un Mundial por undécima vez, continuando así, con su reinado en el deporte.
Luego del partido que contó con récord de asistencia de 15.895 espectadores en el SuperDome de Sídney, Wilson, elegida como la mejor jugadora del torneo, se refirió al logro de su equipo: «Es una gran sensación. Vinimos con el objetivo de conseguir el oro y lo logramos. Australia nos trató magníficamente. No vi canguros, pero no importa porque nos vamos con el oro».
Por otro lado Cheryl Rose, entrenadora del equipo, destacó la actuación de sus dirigidas: «Me siento bendecida por entrenar a este equipo. China jugó un muy buen partido pero nosotras fuimos agresivas en defensa y por momentos pudimos jugar de forma espectacular».
Con esta victoria, las estadounidenses extendieron su racha de triunfos: no pierden en un Mundial desde 2006, torneo en donde quedaron eliminadas por Rusia en las semifinales por 75-68. De este modo, alcanzaron las 60 victorias consecutivas -incluyendo los Juegos Olímpicos- en donde lograron cuatro mundiales consecutivos, quedando a sólo un título del récord que posee la URSS (ganó cinco Mundiales seguidos entre 1959 y 1975).
Australia se quedó con el tercer puesto luego de vencer ampliamente a Canadá por 95-65. Durante el partido fue ovacionada Lauren Jackson, leyenda del básquetbol australiano que, a sus 41 años, jugó su último Mundial luego de nueve años de ausencia con su Selección.
Felipe Garavaglia, 2do B, turno mañana.