Tras algunas temporadas donde supo mantener un nivel de ensueño, título histórico obtenido en el medio y siendo galardonado como el mejor lateral y uno de los mejores jugadores del país, Byron Castillo empezó a ser asediado por los medios de comunicación y sobre todo por trolls en redes sociales, tras darse a conocer la noticia que aún estaba en duda su nacionalidad, aludiendo que aparentemente nació en el año 95 en Colombia.
Años esperó la oportunidad de ser llamado al seleccionado nacional de Ecuador, y cuando pudieron comprobar desde el registro civil ecuatoriano con sus pruebas pertinentes que no tendría inconveniente alguno para vestir la camiseta de la Tri, fue llamado por Gustavo Alfaro.
Todo parecía funcionar en la carrera de Byron, hasta inicios del 2022. Una transferencia fallida al futbol brasileño y luego al mexicano dio inicio a un periplo que parece no tener fin, y a lo que Castillo se ha opuesto y levantado una y otra vez.
Tras la clasificación al Mundial, volvían los fantasmas del pasado sobre su nacionalidad, luego de que Chile impusiera un reclamo ante la FIFA por una supuesta falsificación de documentos. El rendimiento del jugador lógicamente empezó a decaer y se lo veía con un semblante diferente, agobiado por las criticas en muchos casos abusivas, a tal punto que en un partido frente a Aucas, en la ciudad de Quito, pidió el cambio con lagrimas en su rostro en el primer tiempo, luego de cometer errores que derivaron en goles del equipo rival.
Y había mas: a los 3 días denegaban su salida del país en migraciones para jugar la Copa Sudamericana, debido a una denuncia que le habían realizado por manutención.
Así llego al final de la etapa, donde otra vez pudo reponerse, volviendo al rol titular y aparentemente habiéndose despedido del público barcelonista, ya que luego de la gira con la selección en Estados Unidos se trasladó inmediatamente a México, para ser oficializado por la nueva institución que representará, el Club León, que comanda el flamante DT portugués, Renato Paiva. Un viejo conocido de Byron quien supo enfrentarlo y sufrirlo en la LigaPro ecuatoriana.
A pesar de su corta edad, Byron ha demostrado una gran personalidad al enfrentarse y reponerse de todas estas adversidades antes mencionadas, aferrándose más que nunca a su entorno y a sus fieles creencias, y aun a la espera de saber si Ecuador podrá estar en Qatar y el poder debutar en una cita mundialista debido a las denuncias sobre su nacionalidad. Él seguirá enfocado en mejorar, en levantarse ante cada tropiezo y a tratar de tomar con naturalidad las críticas que sufren los deportistas hoy en día.
Javier Burrai