En un Mundial se destacan los mejores jugadores, los estadios, el balón, los diferentes países que asisten a la cita y la canción del evento, pero una Copa del Mundo no seria nada sin su “Mascota”. En este caso llega La´eeb que en idioma árabe significa “Jugador habilidoso” el mismo representa un turbante árabe de tipo Kufiyya. Esta prenda es un tocado de origen asiático medio oriental, utilizado por las personas de países como Qatar, Arabia Saudita o Emiratos Árabes Unidos entre otros, La´eeb es una chalina blanca con un lazo negro, llamado agal o iqal que sujeta al Kufiyya. Para el mundo árabe el turbante o como se diría en su lengua “imamah” es de suma importancia, ya que en la vida cotidiana sirve para protegerse de la arena o de la intensidad de la luz solar, además es usado para disminuir las altas temperaturas del desierto.
Recordando las mascotas de las Copas Mundiales pasadas, se puede llegar a pensar que son muy originales y representativas del país organizador, aunque hay casos particulares. El mundial de 1966 disputado en Inglaterra, fue el inicio de una lista de 15 personajes, que representan o eso intentan al país anfitrión del torneo más prestigioso a nivel de selecciones.
Un león llamado Willie fue el nombre de la mascota pionera, representó de la mejor manera a aquel país, ya que el logo de la selección inglesa posee tres leones. Saltamos a la Copa del Mundo que se organizo en tierra autóctona, Argentina 1978 presentó a Gauchito, con su sombrero, un pañuelo y un rebenque, característico de un gaucho argentino. México en el año 1986, lo representaría un chile jalapeño llamado Pique, este personaje tenía un bigote negro, además de su enorme sombrero de charro. Aunque uno de los más originales fue Footix, el gallo es símbolo nacional y con los colores de la bandera representó a Francia 1998.
Otras mascotas no fueron de las más vistosas, como Ciao de Italia 90 o Los Spherix de Corea/Japón 2002, también hubo representaciones que cumplían con su rol, como el leopardo Zakumi de Sudáfrica 2010, el armadillo Fuleco de Brasil 2014 o el lobo Zavibaka de Rusia 2018. A pesar que no todos los personajes representan la cultura del país anfitrión, siguen siendo las mascotas que recordaremos Mundial tras Mundial.
Facundo Damián Reyna, 2°A T.M.