En una solicitada pública que lleva la firma de más de 100 referentes políticos alineados con Juntos por el Cambio, dirigentes de todo el país le pidieron Estado Nacional que accione, “de manera urgente, proporcional y eficaz, para poner fin a la violencia que desde hace varios años despliega la agrupación Resistencia Ancestral Mapuche (RAM) en la Patagonia”.
Los nombres más destacados que firman ese documento son: Miguel Ángel Pichetto y Patricia Bullrich.
La tensa relación tensa con el pueblo originario mapuche se hace cada vez más difícil en el Sur. Hay intereses opuestos que ponen en riesgo el bienestar de los residentes patagónicos, por el accionar violento de la RAM, la agrupación comandada por Jones Huala.
El mecanismo de estos grupos es movilizarse portando armas de fuego, dañando los bienes materiales del estado y de la población aledaña al lugar del ataque. El motivo de sus actos es obtener el reconocimiento del poder suyo sobre las tierras ancestrales que aseguran fueron arrebatadas injustamente por el Estado. A lo largo de la historia argentina se encuentran varios casos en donde los pueblos originarios intentan obtener la soberanía sobre las tierras que consideran pertenecerles.
Los autores firmantes de la publicación exigieron al gobierno que investigue los hechos violentos y castigue a sus responsables y se priorice la integridad del estado en la Patagonia.