El 20 de mayo del año 2004, la nadadora profesional Celeste Puñet traía al mundo a Candela Giordanino, una hija a quien le transmitió el amor por la natación y hoy es una de las promesas (algunos la describen más como “realidad”) que tiene la Argentina en dicho deporte.
¿Cómo nació este amor por la natación?
Candela cuenta que cuando era chiquita su mamá quería que nadara simplemente como cualquier otro niña, sin necesidad de algo competitivo. “Me enganché, me gustó, tuve y tengo un grupo muy lindo y la verdad es que ahí note que amo nadar”.
“Yo me levanto a las 4:40 de la mañana, vengo a nadar a las 5:30, luego 7:15 salgo, me cambio y luego voy para la escuela, almuerzo y 3:30 vuelvo al club a nadar”, relataba.
Nacida en Santa Fe, se formó en las aguas en el Club Atlético Unión, club donde en distintos deportes se destacaron personalidades históricas del deporte como Carlos Monzón en el boxeo, Leopoldo Luque (Campeón mundial en 1978) en el fútbol.
En 2018 iba a llegar uno de sus grandes saltos dentro del deporte: Giordanino logra clasificarse al Mundial y al Panamericano de aguas abiertas tras pasar un preselectivo en Mendoza y un selectivo en su ciudad natal con un promedio de 1’ 15’’ cada 100 metros, siendo la única mujer de la selección en pasar a ese Mundial.
Si hay que destacar algo es que con el paso de los años, la pequeña niña que solo iba a nadar para aprender, se fue convirtiendo en una chica con mayor espíritu competitivo; “en el preselectivo con mi mamá decíamos ‘hay que nadar fuerte’ y una vez pasé al selectivo pasamos a decir ‘ahora hay que nadar más fuerte” dejando en claro que siempre había que luchar por poder conseguir más».
En su participación en el Mundial de aguas abiertas de Israel demostró una gran actuación quedando 12° en su categoría al hacer 5 Kilómetros en 1h 02’ 47’’; mientras que en los panamericanos llevados a cabo en las Islas Caimán lograba quedarse nada menos que con el segundo lugar. Las victorias siguieron en el siguiente año, donde consiguió el Oro X Campeonato Sudamericano Juvenil 2019 de Chile al hacer los 5km de nado en 49’ 16’’.
Con el tiempo la nadadora fue mejorando hasta que le tocó atravesar un bache que afectó a la gran mayoría de los deportistas del país, la cuarentena.
En diálogo con Telefé contó: “Estuve 4 meses parada totalmente, sin tocar el agua. Al principio de la cuarentena, que hacía un poco de calor, pusimos la Pelopincho en el patio y nadaba un poco ahí. Recién en junio pudimos volver a entrenar en una pileta”. Pero esto no iba a ser impedimento para que dicha inactividad la prive de logros; sin ir más lejos, el pasado 4 de noviembre logró quedarse nuevamente con una medalla de oro, la del Sudamericano Juvenil de Lima 2021 de Aguas Abiertas donde nadó 7,5 Km en 1h 43’ 26’’.
Ahora está en Cali, Colombia donde disputará los juegos Panamericanos Juniors y buscará sumar más medallas a sus palmarés.
Así sigue su camino ascendente. Con apenas 17 años tuvo participaciones en mundiales e incluso destacó a nivel continental. Queda en claro que la frase de “tal palo, tal astilla” se puede aplicar en este caso, ya que la “magia” o “habilidad” que presenta Celeste Puñet, fue transmitida a la joven promesa de Unión de Santa Fe que hoy en día ya está escribiendo su propia historia.