Blancaflor, la icónica harina creada por la empresa Molinos, cambió su famoso logotipo en el que aparecía una cocinera de piel negra y abrió el debate sobre los estándares culturales a los que la sociedad está acostumbrada. Además del revuelo que se armó en las redes sociales, María Rachid, dirigente del área de Derechos Humanos y que supo ser vicepresidenta del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI), brindó a Pirámide Invertida su parecer sobre la situación.
La marca rediseñó su imagen y llegó a ser tendencia en las redes sociales por las cuestiones relacionadas al racismo, a la discriminación y al hecho de que poco a poco las empresas se adaptarán a estos nuevos cambios culturales que deben reflejarse en la comunicación. “El cambio de logotipo responde a una toma de conciencia por parte de la sociedad. Han habido denuncias de personas que se sintieron afectadas y de organizaciones que se expresaron con respecto a este tema”, expresó Rachid.
De hecho, de las 26.975 denuncias recibidas por el INADI, el 3,7% están relacionadas con el racismo, mientras que y el 1,8% están vinculadas estrictamente con el color de piel. “El Estado también entendió la situación y supo identificar que ese logotipo expresaba un mensaje segregacionista de una realidad también racista. Posiblemente, mucha gente no entraba en razón y hoy sí”, añadió la especialista.
En adición a esto, Rachid tocó la temática de los cambios que van sufriendo las diferentes generaciones que habitan en el país: “Lo que hace unos años era natural, como por ejemplo, hablar de un crimen pasional cuando se referían a un femicidio, hoy es inaceptable. Creo que esto responde a una profunda toma de conocimiento por parte de la sociedad sobre la situación”.
El cambio que realizó la empresa Molinos destapó una realidad poco comentada en el país y que llamó la atención de muchos usuarios en las redes sociales: los estándares a los que la población estaba acostumbrada. Varias marcas fueron apuntadas por el hecho de tener conceptos que hacen alusión a las personas de tez negra: Café La Morenita y Nestlé con sus chocolates “Bananita Dolca” -en el cual se muestra prácticamente la misma imagen del mencionado en el titular- son algunos ejemplos destacados.
“Si queremos mejorar como sociedad, siempre tenemos que estar revisando todo. No solamente los logos y mensajes discriminatorios que fueron naturalizados en nuestra cultura, hay muchas cosas por analizar”, dijo Rachid sobre la problemática, y además hizo énfasis en que las personas deberían cuestionarse la forma en la que se expresan y en los modismos que la comunidad tiene adaptado como algo «normal».