Durante el mediodía del jueves 6 de mayo, se llevó a cabo en la quinta de Olivos un almuerzo que reunió al Presidente Alberto Fernández con una comitiva compuesta por 8 dirigentes que representan a la CGT. La misma se vio dirigida por Héctor Daer, Carlos Acuña y Sergio Romero, entre otros. Por parte de Alberto Fernández, el mismo estuvo acompañado por el jefe de Gabinete Santiago Cafiero, el ministro de Trabajo Claudio Moroni, la titular del Ministerio de Salud Carla Vizzotti, y el secretario de Asuntos Estratégicos Gustavo Beliz.
El grupo sindical concertó esta junta con el objetivo de imponer a David Aruachan como el nuevo Superintendente de Servicios de Salud, puesto que quedó vacante tras el fallecimiento de Eugenio Zanarini, quien supo ser la mano derecha del exministro de Salud Ginés González García. Aruachan, previo a la pandemia, supo colaborar Superintendencia de Servicios de Salud, y ahora emergía como el nombre fuerte de la CGT, ya que se trata de un cargo que guarda mucha relación con la misma. Es justamente el Superintendente el que se encarga de manejar y distribuir los fondos dedicados a las obras sociales sindicales. Horas más tarde, se terminó oficializando a Daniel López en el cargo.
Previo a esta reunión, el nombre que se veía mejor posicionado para ocupar el cargo era el de la exdiputada Liliana Korenfeld, que siempre se mostró cerca de la Vicepresidenta de la Nación, y cuyo nombre no era del agrado de la CGT. De todas maneras, el Presidente se encargó de aclarar en la reunión que sería López el que tomaría el control de Servicios de Salud, por lo que la oficialización del mismo no tomó por sorpresa a los dirigentes.
Otro de los temas que se conversó en este concilio tuvo que ver con la situación financiera frágil que están atravesando las obras sociales frente al contexto de pandemia, situación por la que el Presidente, según los dirigentes de la CGT, se comprometió a concentrarse en la libre elección de obra social y los egresos por prestaciones en discapacidad.
La comitiva también se encargó de transmitirle al Presidente su preocupación ante la creciente inflación que azota al país, y pudieron plantear diferentes medidas que buscan evitar la suba en los precios. Entre estas medidas se propuso acrecentar la asistencia social para con los sectores sociales más afectados, así como un mayor control sobre la suba de la canasta alimentaria. Otro de los temas que los dirigentes de la CGT pusieron sobre la mesa, es la necesidad de un diálogo más fluido entre el Gobierno y los sectores empresariales y gremiales, algo que consideran necesario para controlar a los empresarios y el aumento en el precio de sus productos, ya que aseguran que los mismos no le dan importancia a la situación del país y se fijan tan solo en su propio beneficio.
Justamente, y en referencia a estas declaraciones, la CGT dejó en claro que buscará organizar, a partir de Santiago Cafiero, una reunión con todos aquellos empresarios que consideren como “formadores de precios”. A pesar de las críticas hacia la gestión del Gobierno ante la inflación que incrementa de forma acelerada, la cúpula de la CGT también resaltó la efectividad en la modificación al impuesto a las ganancias, que aseguran que llevará mayores ganancias a más de un millón de trabajadores.
Posterior a la reunión, que tuvo una duración aproximada de 2 horas, la cúpula de la CGT se encargó de aclarar que se debatió sobre actividades estratégicas, como salud, educación y transporte. Andrés Rodríguez, dirigente de la central obrera, declaró al otro día de la reunión y aseguró que mantiene sus dudas acerca de los números que exteriorizó el gobierno en referencia a la inflación. Además expresó que el Gobierno prometió que los ingresos de los trabajadores se recuperarán por encima de la inflación.
Otro que se manifestó fue el funcionario de la Secretaría de Economía Social Daniel Menéndez, que habló con La Nación, y afirmó que será necesario un proceso de actualización, de bonos, o de transferencia de ingresos a los hogares más humildes. Asimismo, indicó: “Hoy la asistencia social está por debajo de las necesidades que existen, y hay que hacer un esfuerzo para dar otro tipo de señales”.
Además, Héctor Daer se expresó públicamente en contra del sector ganadero, asegurando que están trasladando precios que no son admisibles para la mesa de los argentinos. Si bien el secretario general de la CGT pidió por más rigor por parte del Gobierno a la hora de tomar medidas y aplicarlas, también se encargó de mostrar su apoyo tanto para el Presidente como para el ministro de Economía Martín Guzmán, asegurando que este último está participando de una gira que tuvo a la vista de todos efectos positivos, refiriéndose a las reuniones que este mantuvo en Europa, buscando apoyo para renegociar la deuda con el Fondo Monetario Internacional.
Tomas Yolde