Los documentales de deportistas son algo a lo que ya estamos acostumbrados a ver. Para que uno de ellos obtenga semejante reconocimiento, debe poseer en su espalda una larga trayectoria. Sin embargo, no son muchos los documentales que, aún años después, siguen prevaleciendo. Ser los mejores en sus deportes no asegura tener el reconocimiento tiempo después, en cambio, haber marcado a cada fanático, sí. Este es el caso de Ayrton Senna.
No hace falta saber mucho de automovilismo para conocer su nombre y su historia, y tal vez, sea eso lo que lo hace grande 26 años después de su fallecimiento. Su vida está escrita en los grandes libros, esos que solo algunos privilegiados logran el mérito suficiente para estar.
Veintiún años de trayectoria le bastaron para quedar en la cabeza de muchos fanáticos de este deporte como el mejor corredor de Fórmula 1, y por qué no, como el más veloz. No son muchos los que pueden posicionarse en esa repisa de ídolos. Y es que Senna traspasaba la pantalla con cada carrera disputada, porque a comparación de otros pilotos, el no necesitaba tener el mejor auto para ganar, sino su propia habilidad.
Su vida fue de ensueño y tan ganadora que tenía que ser retratada en la pantalla grande. Y fue así que Asif Kapadia, ESPN films y Working title films se unieron para crear un documental que causó tanta repercusión, que fue merecedora de cinco premios, entre ellos el del Festival de cine de Los Ángeles y de la Academia británica de las artes cinematográficas y de la televisión (BAFTA). Porque el reportaje no muestra simplemente sus mejores carreras, sino que va más allá de lo que el espectador conoce. El reportaje muestra el lado B de Ayrton Senna.
Tuvo diversos estrenos: el primero en Japón, el 7 de octubre de 2010, y en Brasil, su lugar de nacimiento, el 12 de noviembre. Italia, España e Inglaterra fueron también parte de los estrenos de este documental. Ayrton trascendió las fronteras y es admirado no solo en su propio país sino en todo el mundo.
El documental muestra su vida cronológicamente desde su debut en la máxima categoría del automovilismo en 1984, y repasa sus mejores carreras con los equipos Toleman y Lotus, hasta llegar a McLaren. Este último provocó una de las históricas rivalidades en el mundo de las carreras, que, hasta el día de hoy, sigue siendo considerada de las más grandes: Alain Prost y Senna. Para los espectadores, el documental genera la máxima tensión cuando se desarrolla este conflicto, mostrando no solo las internas, sino las duras declaraciones de ambos, al punto de llegar pedir a sus escuderías no compartir equipo.
Su cronología termina con el Gran Premio de San Marino, en 1994. Con la noticia del fallecimiento del piloto austriaco Roland Ratzenberger el día anterior, Ayrton Senna llegó a disputar la que sería su última carrera siendo obligado a correrla a pesar de su negativa. Con un auto que -se rumoreó no estaba en óptimas condiciones- fue que provocó el fatal accidente luego de chocar con la curva de Tamburello, llamada actualmente S en su honor. El documental muestra, además, como se llevó a cabo la despedida a este piloto, provocando tres días de luto, y un entierro en donde hubo más de un millón de personas.
A diez años del estreno de este documental, aún se sigue recordando a Ayrton Senna, no solo por el piloto que fue, sino que por los actos que realizó paralelamente, provocando que siga presente en los corazones de cada brasileño que supo quererlo como corredor y persona, así también en la Fórmula 1, quien sigue homenajeándolo constantemente.
Julieta Natalutti