Parece que en materia de series y entretenimiento, Alemania ha vuelto a dar en el clavo. En esta oportunidad, y luego del masivo éxito cosechado en todo el mundo por Dark, que reunió a millones de espectadores que seguían los viajes temporales de Jonas Kahnwald, del país europeo surge una nueva producción que pisa muy fuerte en Netflix: se trata de Biohackers, una serie que trata temas de vanguardia y que mezcla avances tecnológicos en el campo de la medicina, la ética y las relaciones juveniles.
La serie, que apenas cuenta con seis -excelentes- capítulos, ya se consolidó como tendencia en la Argentina y va por el mismo camino en Europa Occidental y Estados Unidos. Creada por Christian Ditter, quien dirigió a Rebel Wilson y a Dakota Johnson en la comedia romántica How to be Single , la producción está protagonizada por Luna Wedler (Mia), una chica que comienza a estudiar medicina y se anota en las clases de la profesora Tanja Lorenz, interpretada por Jessica Schwarz. El resto del elenco se completa con Adrian Julius, Caro Cult, Thomas Prenn, Sebastian Doppelbauer, Jing Xiang y Benno Fürmann.
Lorenz, que es una docente profundamente admirada en la universidad de Friburgo, alienta a los jóvenes a aprender los beneficios de la biología sintética y se encuentra con Mia, quien se esfuerza académicamente para llamar la atención de su profesora. No obstante, a medida que se desarrolla la historia, sale a la luz la verdadera razón por la que la estudiante quiere acercarse tanto a su maestra.
“¿Qué pasa cuando las personas comunes, como tú o yo, nos topamos con cosas que son más grandes que nosotros? ¿Qué tan lejos nos puede llevar la ambición por la fama… o la venganza? ¿Dónde establecimos nuestros límites éticos y morales?”, son algunos de los cuestionamientos que, de acuerdo con Christian Ditter, creador de la serie, son respondidos a lo largo de los seis capítulos.
En Biohackers se pone como elemento principal a la biología y a las modificaciones genéticas, y se hace una clara advertencia sobre cómo puede impactar esto en la sociedad mundial.
¿Qué es el biohacking? También conocida como “biología de garaje”, trata de acercar la ciencia a las personas trasladando los laboratorios a las casas. Quienes practican el biohacking buscan ser miembros activos de su propia salud y controlar cómo sus cuerpos interactúan con el mundo que los rodea. Este movimiento surge del transhumanismo, que se refiere a las mejoras de las capacidades del organismo a través de la ingeniería genética.
A medida que van transcurriendo los capítulos, la serie se vuelve cada vez más misteriosa y hasta pone de manifiesto algunas conexiones con la pandemia de Covid-19 que azota a la humanidad en estos momentos. Tanto es así que Netflix, para evitar asociaciones que pudieran perjudicarle, decidió postergar el estreno. Aunque en la serie no hay cuarentena como la que está conociendo el mundo actualmente, sí existe un virus y la necesidad imperiosa de crear una vacuna que pueda detener su avance.
Biología, genética y pandemia aparte, la producción está centrada en las relaciones adolescentes. Mia y sus tres compañeros de habitación son un combo que da para situaciones inteligentes, sentimentales y extravagantes. Un parecido bastante cercano con Dark: la serie se cuenta en varias líneas temporales, lo que, en un principio, podría llegar a confundir a algún espectador despistado, o a aquellos que ven la tele acompañados del ‘scrolling’ del celular. No obstante, luego de que van pasando los minutos, toda la historia queda unida por un solo hilo conductor y es muy fácil seguirle la pista.
Es tanto el éxito de Biohackers que Netflix ya confirmó que se estrenará una segunda temporada, la cual se grabará entre las ciudades alemanas de Múnich y Friburgo. Su creador, Christian Ditter, incluso ya adelantó que esta segunda entrega también tratará cuestiones morales en torno al biohacking y la edición del genoma.
Juan Méndez
2° «B» T.N.