En su trayectoria, Luciano Vicentin, oriundo de Paraná, jugó en un breve paso durante su niñez en el Club Argentinos Juniors, arribó en las divisiones juveniles del Club Atlético Estudiantes y en el Club Atlético Paracao, hasta llegar a la primera del voleibol argentino para vestir los colores de River Plate. Además, estuvo representando la selección, donde obtuvo la medalla dorada en los Juegos Sudamericanos de Cochabamba 2018 y disputó los Mundiales Juveniles de sub-19 2017 y sub-21 2019, llevados a cabo en Bahréin; mientras que con la mayor disputó la Copa del Mundo 2019.
«Luchi» se unirá a las filas del BBTS Bielsko-Biala para arrancar la temporada con la ambición principal de regresar a la máxima categoría del voleibol de Polonia. Afirmó sus expectativas en el nuevo equipo donde jugará: «Esta temporada queremos salir campeones del certamen de ascenso y subir a la Primera División. En cuanto a lo personal, desde el inicio me planteo volver a tener el nivel que tenía antes de que sucedieran los inconvenientes que conllevaron a la finalización de la Liga Argentina. Buscaré afianzarme en la titularidad del equipo y lograr continuidad con el rodaje de los partidos para entregarle razones al entrenador, porque en ningún lugar te regalan el puesto».
El paranaense no pudo contener la inmensa alegría que le dio llegar al equipo polaco, y recalcó: «El traspaso me dio una alegría increíble y una motivación enorme. Todavía resta que viaje hacia Polonia, pero me otorga la posibilidad de cumplir el sueño de jugar en Europa para propiciar un salto de calidad y también un incremento económico. Estoy feliz por estas cuestiones y trataré de disfrutar todo lo posible para sacarle el mayor provecho para seguir subiendo mi nivel de juego y mejorar mi carrera como jugador».
En este sentido, contó cómo imagina su llegada al conjunto polaco: «Me imagino que me encontraré con un club que posee una buena estructura y estará muy organizado, en el cual me van a ofrecer para que mejore personalmente, actúe bien y el equipo sume victorias para lograr los objetivos planteados desde la institución».
En este contexto, el jugador de 20 años se refirió a cómo transitó esta época intermediada por el coronavirus: «Me costó entrenar en mi hogar. Durante el primer mes me adapté a una rutina y lo realicé con normalidad porque lo llevaba adelante con mis ex compañeros de River a través de la plataforma virtual Zoom».
Aislándose de las cuestiones deportivas, este receso fue importante para mantener la cabeza enfocada en lo que viene. Es por eso que Vicentin aprovechó el tiempo para reencontrarse él mismo: «Este periodo me llevó a compartir el tiempo con mi familia. Hacía más de dos años que no estaba tanto tiempo en mi casa y en Paraná, y poder estar cerca de las personas de mi círculo íntimo me ayudó en el costado humano. Terminó siendo importante para dar este paso trascendental», aseguró.
Vicentin contó que desea afrontar el 2020 fortaleciéndose como jugador profesional ya que al ser joven todavía no llegó al nivel máximo que puede llegar a dar. Cree que esto es un ida y vuelta en donde un día sos «el mejor» y otro día «el peor» pero que así es el deporte en general: «Es esencial aprender a conducir estas cuestiones en una línea de buen rendimiento y tratar de tener actuaciones de seis o siete puntos en todos los cotejos con la menor cantidad de errores porque es un respaldo de confianza», expresó.
Iván Franco Cruz