La temporada 2020 de la Fórmula 1 comenzó en Austria, con la primera de las ocho carreras confirmadas tras la suspensión del calendario por el coronavirus. Y Valterri Bottas fue el primer ganador.
Cuatro meses después que la primera carrera fuera cancelada a último momento, la temporada de la categoría reina finalmente se puso en marcha el fin de semana pasado en otro continente y en un mundo distinto. No hubo espectadores en el circuito de Spielberg. La situación del coronavirus no permite aclarar cuántas carreras se podrán disputar, ni dónde. Y ello no será lo único inusual. Los pilotos debatieron si se arrodillarían en la línea de largada previo a la carrera del domingo como gesto de solidaridad al movimiento Black Lives Matter. El campeón vigente, Lewis Hamilton, alzó la voz en respaldo al movimiento y compitió con un monoplaza Mercedes pintado totalmente de negro, en vez del color plata como lo hace usualmente, como mensaje contra el racismo.
Hubo menos gente en los boxes, todos llevaban mascarillas, todo el que ingresó a la pista, incluyendo un pequeño grupo de periodistas, tuvo que someterse a pruebas de COVID-19 que arrojaron negativo, con diagnósticos adicionales cada cinco días. Se prohibió que los integrantes de los equipos de la F1 departan con sus rivales, dentro o fuera de la pista, y la prensa no tuvo acceso al paddock. Los pilotos tuvieron que responder a una batería de preguntas, pero las conferencias fueron mediante enlaces de video y las preguntas fueron enviadas de antemano. Y, por supuesto, el circuito de Spielberg de 4,3 kilómetros estuvo casi desierto y lejos de zonas urbanas, ofrece un sitio aislado ante tanto temor por el coronavirus. Pero por ese motivo se ha dispuesto un estricto protocolo sanitario.
Pero algo siguió igual: el rugido de los autos al ponerse en marcha. El viernes pasado, se reanudó la Fórmula 1. Lo hizo en el Red Bull Ring donde el domingo se puso en juego el trofeo por el Gran Premio de Austria.
«Es muy importante aprovechar este momento», dijo Hamilton, el único piloto de raza negra en consagrarse campeón de la F1.
Se trata de salvar la temporada con la disputa de ocho carreras en Europa a lo largo de 10 semanas, cerrando con el GP de Italia el 6 de septiembre. La F1 aún no define qué hacer con otras carreras pospuestas, para así completar la temporada con entre 15 y 18 de las 22 válidas que se programaron. También se disputarán dos carreras consecutivas en el circuito del Gran Premio de Gran Bretaña.
Si la temporada continúa afuera de Europa, culminará con expediciones a Bahréin y Abu Dabi en diciembre. «No sabemos cuántas carreras vamos a disputar», dijo Carlos Sainz Jr., actual piloto de McLaren, «Es una situación sin precedentes», agregó.
Tras numerosas especulaciones la respuesta no tardó en llegar, Bottas fue el gran ganador. Valtteri Bottas consiguió el primer puesto del GP Austria de Fórmula 1. El finlandés firmó la primera victoria de la temporada y la nº 8 de su trayectoria deportiva.
La segunda carrera también tendrá lugar en territorio austríaco y lo han llamado Gran Premio de Estiria.
Tras pasar por Austria el Mundial seguirá en Hungría y después habrá otro doble programa en Silverstone el 2 y el 9 de agosto. Allí también le han cambiado el nombre y pasará a llamarse Gran Premio 70º Aniversario.
Los circuitos de Montmeló en Barcelona, Spa y Monza completarán las primeras ocho carreras de la Fórmula 1 por Europa.
Mauro Villar, 2° A, turno tarde.