Luego del regreso de las ligas de élite, ya hay un campeón. A falta de dos fechas para la finalización del campeonato, Bayern Münich venció como visitante al Werder Bremen por 1 a 0 y cerró la fecha 32, quedándose con un nuevo título.
Con esta conquista, el conjunto alemán consiguió alcanzar la marca de Juventus, en la Serie A, aunque los italianos podrían esta temporada llegar a los 9 títulos de forma seguida.
De esta manera, Bayern Munich llegó a las 29 consagraciones en la historia de la liga alemana; detrás están Borussia Dortmund y Borussia Monchengladbach, con cinco, Werder Bremen, cuatro, Hamburgo y Stuttgart, tres, Colonia y Kaiserslautern con dos, T.S.V Munchen, Braunscheiwrg T.S.V Eintracht Frankfurt, Núremberg y Wolsfsburgo, con uno.
El festejo de los alemanes se dio sin púbico por la pandemia, aunque según reflejaron las imágenes televisivas, los jugadores celebraron con remeras alusivas a las ocho consagraciones y en las tribunas, con distanciamiento social, lo hicieron los directivos.
El club de Münich sumó 73 unidades y le sacó 7 puntos a Borussia Dortmund, que venció a Mainz 05.
El club bávaro se dio el lujo de rotar jugadores e ir probando para el futuro. En el reinicio se vio un nivel muy alto en varios de sus jugadores; el lateral izquierdo Alphonso Davies fue clave en su banda, participó de ataques que terminaron en goles y fue clave en la parte defensiva; su nivel hizo retrasar a David Alaba en la zona de los centrales y dejar para los relevos a Lucas Hernández, refuerzo que llegó desde el Atlético Madrid y último campeón del mundo.
Joshua Kimmich se adueñó del mediocampo, con apenas 25 años juega con una tranquilidad de un hombre de experiencia y fue clave para el título.
En la parte ofensiva, el interminable Thomas Müller, líder en asistencias, aportó también en la parte goleadora.
El extremo Serge Gnabry, de 24 años ocupó el puesto que dejó el francés Frank Ribery. Es atrevido y muy punzante en el ataque; marcó 12 goles y dio 8 asistencias en las 32 fechas.
Y el máximo goleador de Europa, Robert Lewandowski, en lo que va del año lleva 54 goles en 58 partidos, lo que lo posiciona como el máximo goleador del mundo, por delante de Mbappe, Messi y Cristiano, entre otros.
No hay jugador más determinante que el polaco: comenzó la temporada de una forma inmejorable, marcando 19 goles en 17 encuentros. Es uno de los mejores. Se encuentra dentro de los máximos anotadores en la historia de la Bundesliga y es el referente en su posición. Solo 4 jugadores marcaron más goles que él en Bayern Münich y eso ocurrió hace mucho tiempo: en los años 70 y 80.
Agustín Cerutti