Alguna vez ha pasado de conocer a una persona que, ya sea actitudinal o físicamente, sea parecido a su padre/madre. Creer o reventar, estas cosas ocurren también en el mundo de la música. Quizás es imposible que una canción sea “hija” de otra, pero los homenajes existen. Valentín Oliva (más conocido como “Wos”) es uno de los traperos más exitosos de la Argentina actualmente. En sus funciones en vivo se aprecia una fusión de trap y rock muy buena, y exótica. Se ha reconocido como un fiel ricotero (así se hacen llamar los fanáticos de Los redonditos de ricota) y esto hizo que la cabeza de la antigua banda, Carlos Alberto “El Indio” Solari, pose sus ojos en él y preste sus oídos a su música.
Ambos músicos se han elogiado mutuamente, pero es el trapero quién ha reconocido admiración por el otro. Es por eso que Wos, en su disco “Caravana” (el primero que saca), ha creado una canción llamada “Luz Delito”. Ya solamente por el nombre, el homenaje es más que claro hacia “Luzbelito y las sirenas”, tema que Los Redondos sacaron en su álbum de nombre homónimo a la canción en cuestión.
En “Luzbelito” se aprecia una crítica a la sociedad. “Luzbel” es uno de los tantos nombres que se usan para nombrar al Diablo, eso quiere decir que “Luzbelito” es una forma de llamar a un supuesto hijo suyo, como si fuera “Luzbel Junior”. A través de esta idea de hijo del demonio, el Indio se atreve a meterse con distintas creencias y comportamientos que el ser humano es capaz de tener. Se aprecia en la letra de la canción a un hijo del Diablo enojado, triste y frustrado, porque está confundido. El sentimiento de confusión se aprecia cuando dice: “¿Estos ojos de quién son? ¿De quién son mis deseos de hoy?”. Los demás sentimientos se identifican claramente durante toda la canción, pero un ejemplo es: “Un par de c*los va a patear, de los que le juran más lealtad”. Mediante estas letras, la canción da a entender que “Luzbelito” es toda la sociedad en general, ya que nombra los peores sentimientos que el ser humano puede llegar a tener. La lírica explica que cuando dejamos salir esos sentimientos, actuamos como un “hijo del Diablo”.
Por su parte, en “Luz Delito”, hay diversos análisis muy diferentes unos con otros. La teoría que más concuerda (por su parecido con lo que narra “Luzbelito”) es que el trapero quiso marcar esos sentimientos nefastos del otro tema pero en la parte más adinerada del pueblo, o sea, el gobierno. Wos admitió ser “anti-macrista” en pleno gobierno de Mauricio Macri, lo cual coincidió con su ascenso en el estrellato, y aprovechó en varias de sus canciones para criticar al mandatario de aquel entonces. Por ejemplo: “¿Y qué tal? Salí a fumar a tu vereda, tenes cara de asco porque la verdad te altera. Tenes un perro feo, los ojos de madera y el alma igual al maniquí que mira en la vidriera”. Las políticas derechistas o centroderechistas, como se proclamaba el último gobierno, ven con malos ojos el consumo de marihuana, y hasta lo asocian con algo de los barrios bajos. En ese sentido son muy discriminatorios, basándose en el poder económico de cada uno.
¿Qué tienen en común entonces “Luzbelito” y “Luz Delito”? La primera hace una crítica a la sociedad, marcando los peores sentimientos que el humano puede tener. La segunda traslada esos sentimientos al ambiente político, porque creía el autor que eran esos los sentimientos que guiaban a quienes gobernaban aquel entonces.
Franco Janczewski, 2A, TM