En estos días, a un mes y medio de iniciada la cuarentena, múltiples son las dificultades que se le presentan a las personas en su vida cotidiana día tras día, siendo la obtención del alimento una de las principales. Actualmente, gracias a la globalización y avances tecnológicos tenemos a disponibilidad diversas plataformas como “Glovo”, “Rappi” y “Pedidos Ya” que nos permiten tener al alcance de nuestro celular cualquier tipo de envió que necesitemos. Pero, ¿Cómo es la situación de los repartidores en esta cuarentena? ¿Acaso no corren un riesgo al estar expuestos?
Siendo una de las 48 actividades anunciadas y permitidas por el Presidente Alberto Fernández en su última conferencia de prensa, los deliverys están constantemente expuestos en su circulación por la calle y en la entrega de pedidos. Al ser las únicas opciones para la entrega de pedidos, es obligación para estos, como para cualquier otro ciudadano en estos días, la utilización de barbijos, alcohol en gel y en especial guantes de látex para evitar de la mayor manera posible el contagio. Otras medidas implementadas por estas empresas para sus empleados son las medidas de pago. La empresa Pedidos Ya exige el no contacto entre cliente y repartidor, como a su vez el pago únicamente y a través del depósito con tarjeta de crédito.
La necesidad de subsistir para estos trabajadores, transforma en un deber el tener que salir a repartir distintos pedidos, dejándolos expuestos a la contaminación del virus. Pero este riesgo en toda esta situación otorga un beneficio para los repartidores, la gran aumenta de demanda. Este aumento de la demanda se ve obviamente producido por los intentos de las personas de quedarse en sus casa el mayor tiempo posible, generando un aumento en los pedidos y esfuerzo de los trabajadores. A su vez estos pedidos no se quedan únicamente en los alimentos, sino que también están dirigidos al envío de medicamentos y productos higiénicos que permitan garantizar la seguridad y el cuidado de la salud.
Hoy en día, con toda esta situación, el trabajo del delivery y de los repartidores, no obtiene el reconocimiento que debería por parte de la sociedad argentina. Haciendo el trabajo sucio, sería difícil pensar una cuarentena y aislamiento responsable sin la participación de estos repartidores que nos permiten tener al alcance de nuestras manos cualquier necesidad que necesitemos. Por eso sería también adecuado, reconocer lo fundamental que son ellos para toda la población argentina corriendo un gran riesgo al estar expuestos en estos momentos de crisis e incertidumbre.
Pedro Occhiuzzi 2 A TM