En época de pandemia, y tras la viralización de carteles con mensajes de apoyo o discriminación por parte de vecinos del personal de salud, nos contactamos con familiares de médicos y enfermeros, para conocer cómo es convivir con alguien tan expuesto al contagio de coronavirus.
Karen Gutierrez es pareja de Matías, médico del Hospital Británico, y cuenta que vive tranquila, quizás un poco nerviosa cuando se confirma algún caso en el hospital. En cuanto a las prevenciones, enumera: “Cuando él vuelve de su turno, me avisa cuando está llegando, lo espero con la puerta abierta, se retira el calzado del lado de afuera y lo deja con su mochila. Tiramos Lysoform a todos los objetos, a él desde lejos lo rocío con alcohol al 70% y va directo a bañarse y lavar su ropa”. Ella trabaja en un consultorio odontológico, que le otorgó home office, ya que su pareja se ve muy expuesta.
Nahiara Covarrubia es enfermera en el Sanatorio Los Arcos, y su pareja Nicolás Domingues explica que ella sube por las escaleras, y él la espera con los elementos para desinfectar, como un trapo con lavandina en la entrada para los zapatos. Ella ingresa a la casa sin medias, limpia sus pertenencias, pone a lavar su ropa y se va a bañar. Finalmente, luego pasa un trapo con lavandina por todos los lugares que pasó, haciendo el mismo recorrido.