A mediados de enero se hablaba de este tema en el mundo, pero nadie se imaginaba que una simple gripe se transformaría en una pandemia. Múltiples países de Europa entraron en emergencia sanitaria debido a la falta de insumos a lo largo de los hospitales tanto públicos como privados. En Argentina se registró el primer caso de coronavirus a principios de marzo y ese fue el puntapié inicial para que el presidente de la nación, Alberto Fernández, dispusiera del aislamiento obligatorio social y preventivo en todo el país.
En esta cuarentena, muchas familias, comercios y PyMES fueron afectadas por el simple hecho de que se ganan el sueldo día a día, así también como los clubes de barrio a los que, precisamente, no se puede concurrir y no les queda otra opción más que cerrar. Ese lugar que en cada fin de semana se reunían familias, niños de todo el barrio a realizar actividad física y a desprenderse de su rutina diaria. Algunos de los clubes más “Grandes” del país, entre los que se encuentran San Lorenzo, Boca Juniors, Lanús, entre otros, ofrecieron sus instalaciones para recibir pacientes con síntomas activos para evitar el colapso del sistema dentro los hospitales.
El sueldo de los deportistas y trabajadores de estos clubes no se verá tan afectado por el simple hecho de que poseen un gran poder adquisitivo, comparado con otros clubes, como para sostener y garantizarles su remuneración a todas las disciplinas que poseen, pero en el caso de los clubes “chicos”, al no tener los ingresos necesarios para pagar todas las cuentas de sus instalaciones y a los deportistas, tienen que depender de una ayuda del estado. El 14 de febrero el gobierno lanzó una medida económica para todas las asociaciones y federaciones, conocida como REPRO (programa de reproducción productiva) que tiene como objetivo amortiguar el impacto económico que se puede generar en los clubes con la situación actual del país, esta misma va a garantizar el empleo y la producción de estos mismos. Frente a esta situación, Matías Lammens, ministro de Turismo y Deportes, expresó: “Conocemos bien el rol social que cumplen los clubes y cómo se pusieron inmediatamente a disposición ofreciendo sus instalaciones para combatir esta pandemia. Por eso, vamos a acompañarlos en este momento crítico con estas medidas y con otras que anunciaremos oportunamente”.
A través de las redes sociales de F.E.V.A (Federación del Voleibol Argentino) y Fe.me.Bal. (Federación Metropolitana de Balonmano de la República Argentina) se publicaron estas nuevas medidas que tomó el gobierno nacional, por la cual cada empleado del club recibirá alrededor de 6 mil y 10 mil pesos; en cuanto a los que tengan menos empleadores habrá reducciones de hasta 95% del pago de las contribuciones patronales. La secretaria de deportes, Inés Arrondo, señaló: “Estamos trabajando para cuidar la salud de todos, pero también para contener el daño que genera el coronavirus en la economía. Por eso desde el gobierno nacional dispusimos medidas concretas para preservar el empleo, incluyendo a los clubes”.
Frente a esta situación actual, la ACLAV decidió que la liga de voleibol argentina 19/20 se finalice así, quedando un campeón vacante, ya que se disputaba la semifinal de dicho torneo entre Bolívar, UPCN, Ciudad Vóley y Gigantes. En un comunicado mediante redes sociales la ACLAV aclaró: “La edición 2019/2020 de la L.V.A (liga de voleibol argentina) no tendrá un equipo campeón, al darse la imposibilidad de definir el título en la cancha. Para la confección del fixture de la temporada próxima y demás aspectos en los que resulte necesario, se tendrán en cuenta las posiciones al cierre de la fase regular 19/20. La única excepción será la definición del primer equipo clasificado al sudamericano 2021, beneficio reservado habitualmente para el campeón LVA. La forma de clasificación será definida por el consejo directivo ACLAV en una futura reunión de consejo y los cuatro equipos semifinalistas tendrán el derecho deportivo de disputar dicha plaza”.
Iván Franco Cruz