Tras el paso de los días la pandemia que aterroriza al mundo continúa avanzando en su rumbo incierto en cada sitio por donde se presenta. Causa pánico, dolor, muertes, agonía y sufrimiento de millones de personas a lo largo y ancho del planeta. Además, se puede destacar el hecho de que, como contra medida ante la situación, cientos de países se ven obligados a realizar maniobras extraordinarias en más de un aspecto. A propósito, se mencionan cambios en los transportes, comercios, estadías, circulación peatonal y vehicular, entretenimientos y controles para frenar la propagación de este virus denominado Covid-19.
Si bien los deportes se ven afectados prácticamente en su totalidad, es notorio la ausencia del más popular que se destaca sobre el resto, que evidentemente es el fútbol. Son pocas las ligas o competencias que no han cancelado el normal desarrollo de sus actividades, aunque se conocen algunas excepciones como las de Burundí, Nicaragua y Bielorrusia, entre otros. Sin embargo, y afectando a miles de consumidores de este juego, el mundo está privado de disfrutar este espectáculo deportivo tan popular con el paso del tiempo.
Los futbolistas de las diferentes regiones se prestan a las órdenes de sus clubes, que en su mayoría, proponen planes de trabajo con ejercicios que pueden realizar en sus hogares acompañados de un plan alimenticio que consta de una dieta saludable para generar el equilibrio necesario como deportistas profesionales. La tecnología es una herramienta utilizada a diario por los espectadores en todo el mundo, ya que la utilizan como entrenamiento a través de las redes sociales observando lo que comparten los protagonistas desde sus hogares, que disminuye la tensión que atraviesa la humanidad tras la propagación del virus.
También hay que destacar la cantidad de dinero que se están perdiendo, como el caso de la Primer League, que pierde por cada fecha que no se juega unos 700 u 800 millones de euros y en las transmisiones es una pérdida de 150 a 200 millones de euros. La Bundesliga es la tercera liga más afectada por pérdidas económicas, cada fecha que no se disputa tiene una pérdida de 130 y 140 millones de euros; por transmisiones de partidos entre 300 y 400 millones de euros; y sumado otros gastos, tiene un balance negativo que sería un total de 650 a 750 millones de euros de pérdidas. La Liga de España también se ve fuertemente atacada, las pérdidas por cada jornada no disputada rondan los 150 a 170 millones de euros. En tanto, los ingresos de transmisión que no se generan ascienden a los 500 y 600 millones de euros. Estas tres ligas demuestran cómo un virus puede afectar todo un mercado y las pérdidas económicas en el mundo del deporte son de 7 mil millones de dólares, por el momento habrá que ver cómo seguirá esta situación y seguramente el número sea cada vez peor.
Ligas como la de Nicaragua, Bielorrusia y Burundí tienen un aumento de espectadores regular y de sponsors. Si bien hay infectados de coronavirus en cada uno de estos países, al haber un número tan bajo, le restan importancia y siguen adelante con sus eventos deportivos y principalmente con el fútbol. En la liga nicaragüense, los jugadores tienen la posibilidad de tomar tres decisiones: una es elegir jugar, otra no disputar ningún partido y hacer la cuarentena en el país o sino ir a cumplir con el aislamiento en el país de origen.
Seguramente esta pandemia es una de las que más afecte a los mercados a nivel mundial desde la crisis inmobiliaria del 2008. El FMI explicó que se cree que esto dejará más daños que la caída de la Bolsa de 1930.
Gonzalo Orué y Tomas Buchhammer