No caben dudas, los tres hermanos Simonet y el handball son sinónimos. Más aún representando al seleccionado nacional argentino, sus últimos hitos en el año 2019 fueron su medalla de oro obtenida en los Juegos Panamericanos de Lima 2019 y el más reciente triunfo en el Cuatro Naciones disputado en la provincia argentina de San Juan, donde Los Gladiadores pudieron alzar el trofeo de campeón. En el mismo derrotaron a selecciones de gran nivel como son Rusia y Polonia (en el cierre perdieron ante España).
Los hermanos, oriundos del barrio de Vicente López, hijos de Luis Simonet y Alicia Moldes, ambos exjugadores nacionales de handball, nacieron en un entorno donde el deporte representó una prioridad y cuya base conformó los cimientos del apellido familiar.
No es casualidad que el mejor jugador de la historia argentina de este deporte sea Diego Simonet, el hermano del medio, actual jugador del Montpellier de la Liga de Francia. Nacido en 1989, apodado «Chino», es un atleta sin igual, a tal punto que se dice que es el Messi de este deporte. Su punto más alto fue en 2018 cuando con su actual equipo se consagró campeón de la Champions League de handball, donde también consiguió ser nombrado el mejor jugador (MVP) en la final luego de marcar 6 goles y ser el máximo anotador.
Por su parte, el menor de los Simonet, Pablo Ariel, se encuentra en España jugando para el BM Benidorm. Su función como lateral izquierdo la cumple de manera sobresaliente, su 1,92 metro de altura impone gran presencia física para lidiar con sus oponentes de turno. Con sus 27 años estará disputando en 2020, seguramente, los Juegos Olímpicos de Tokio.
Por último, el mayor de la camada Simonet, Sebastián. Un referente para sus hermanos y también para sus pares. Portador de una extensa carrera con Los Gladiadores se encuentra a sus 33 años jugando para el club que lo vio nacer, SAG Ballester. Es sin duda una de las grandes figuras que representan a la Liga Nacional de Clubes.
Juan Pintos, 2° B, turno mañana