Con tres finales de mundiales en 24 años, se repetirá el mismo rival que en la final de 2007. Los “Springboks” sudafricanos se preparan para volver a repetir el resultado de la final anterior frente a Inglaterra. Ahora los favoritos son los europeos, pero el conjunto africano tiene pensado volver a coronarse como aquella vez, luego de 12 años de espera.
Los ingleses tienen el favoritismo ya que no perdieron ningún partido en el certamen y llegan luego de una cómoda victoria por 19 a 7 frente a la potente Nueva Zelanda. Sudáfrica, en cambio, empezó con el pie izquierdo ya que en el primer partido de este Mundial había perdido frente a los All Blacks. Como en 1995 y 2007 ahora quieren volver a levantar una copa en Yokohama.
Sudáfrica cortó una racha de cuatro derrotas consecutivas frente a los galeses al ganarle por 19 a 16 en un partido sin mucha lucidez, pero con el pie de Handre Pollard que tuvo un 100% de efectividad en los tiros a los palos, pudo sobre el final con un penal conseguido de un line-out lograr la clasificación a la final luego de dos mundiales sin alcanzarla.
Los sudafricanos merecieron la victoria ya que provocaron más peligro cuando tenían la posesión de la pelota, aunque los dos equipos buscaban más el error del adversario que generar ellos las jugadas. Fue un final apasionante como las demás actuaciones de estos dos conjuntos en mundiales, porque el cierre del marcador se dio a cinco minutos del final del encuentro poniéndole más presión a Gales para dar vuelta el resultado.
Así los europeos y los africanos volverán a verse cara a cara en una final el próximo sabado, donde los “Springboks” llegan con Pollard en su gran momento y confiados ya que todas las veces que llegaron a la final supieron como ganarla.
Juan Francisco Rosales, 2° B, Turno mañana