Tras una ardua evaluación por parte del Law Review Group (Grupo de Revisión de las Leyes), se aprobaron seis pruebas a las reglas propuestas por las uniones, dueños de las competencias y del International Rugby Players. Dichas pruebas serán puestas en práctica en competencias a nivel mundial y si se aprueban serán empleadas en el próximo ciclo de Rugby World Cup en 2023.
El tackle es lo que más se trabajará debido a preocupantes datos recolectados en un estudio, en donde se refleja lo peligrosa que puede llegar a ser esta jugada, ya que consignaron que la mitad de las lesiones de un partido de rugby y el 76% de las conmociones cerebrales se producen por el tackle.
Las pruebas:
(PC)=pruebas cerradas
1-Juego con el pie: hará que las defensas estén retrasadas ante la posibilidad de que sus rivales pateen al touch. (PC)
2-Warning de técnica de tackle alto: prevención de lesión de cabeza. (PC)
3-Tackle a la cintura: reducir el riesgo de lesiones de cabeza. (PC)
4-Revisión de tarjeta amarilla cuando un jugador está en el sin-bin por juego peligroso: asegurarse de que un jugador culpable de juego peligroso sea sancionado correctamente. (PC)
5-Límite de penalizaciones (penales y free-kicks) por equipo: menos penalidades. Testeos en el National Rugby Championship en Australia (NRC)
6-Salida de drop desde la línea de try al equipo defensor cuando un jugador atacante, que lleva el balón al ingoal, no puede apoyar: recompensar la buena defensa y promover un rugby mas veloz. Testeos en el NRC en Australia.
Lucía González Heguy, 2° B, turno mañana.