Ocho son los países expectantes de la decisión final que tomará la FIFA en mayo del próximo año, después de una visita pactada para enero y febrero. Además de Argentina y teniendo en cuenta la baja de Bolivia y Bélgica, las naciones postulantes son: Brasil, Sudáfrica, Australia, Colombia, Japón, Nueva Zelanda y Corea del Sur unida a Corea del Norte.
Clara está la inferioridad de Argentina ante países ampliamente desarrollados tanto a nivel de infraestructura -Japón es un claro ejemplo de ello- como económico. Además, una condición impuesta por FIFA puede llegar a ubicar al país en una situación de desventaja: el órgano más importante del fútbol mundial solicita a cada uno de los países brindar una especulación sobre el precio del dólar en el futuro; tarea un tanto complicada debido a la incertidumbre en la que se ve inmiscuida Argentina.
Otro paso a cumplir es el de los estadios. Al igual que en el fútbol masculino, la FIFA requiere ocho estadios que cumplan con ciertos requisitos. La capacidad para la zona de grupos deberá ser de 30000 espectadores, de octavos a semifinales 35 mil y 40 mil para el cotejo final. Teniendo en cuenta estas características, solo dos son los estadios en condiciones de albergar esa cantidad de personas: la Bombonera y el Monumental, aunque deberían realizarse una serie de refacciones en las zonas de acceso. Por otro lado, el Mario Alberto Kempes no tendría que ser sometido a ninguna modificación. El Estadio Único de Santiago del Estero, que está en la última fase de construcción, representara una opción más.
No solo los estadios son materia de logística organizacional, sino también lo son los complejos hoteleros, el sistema de transporte, centros de entrenamientos, entre otros. Lo cierto es que aún quedan muchos aspectos a planificar y muy poco tiempo en el que hacerlo, ya que el 13 de diciembre la AFA deberá presentar los papeles que hagan oficial su intención de candidato. La presentación de las provincias sede va a ser un tema a resolver en las próximas semanas, acompañada de planos y documentos con los cambios a realizar en los estadios.
Si bien la idea de que Argentina se quede con la organización del Mundial parece lejana, los trabajos administrativos en AFA se intensifican para tratar de convencer a quienes deciden, que el país puede hacerse cargo de planificar un evento de tales magnitudes.
Por Belén Medina, 2B Turno tarde.